«Las llamas avanzaban a toda velocidad, como si hubieran tirado gasolina»

Las agujas del reloj pasaban de las cuatro de la tarde cuando Miguel y su familia se disponían a volver a casa tras disfrutar de una comida en el balneario de Chulilla. Este padre había decidido pararse en la central eléctrica situada cerca del recinto para observar el edificio cuando de pronto vio llamas en las proximidades, exactamente junto a un poste de la línea eléctrica vinculada a la instalación.

«Era un trozo de terreno muy pequeño, de alrededor de 40 centímetros de lado, pero en un minuto ya afectaba a una superficie de varios metros. Al poco tiempo ya era, por lo menos, de medio kilómetro de extensión», explicaba ayer desde la seguridad de su hogar, situado en l'Horta Sud. «El fuego ha empezado a subir monte arriba a toda velocidad. Ha sido espectacular, como si alguien estuviera insuflando aire a las llamas o tirando gasolina», continuó.

Consciente de los riesgos, le dio tiempo a llamar al teléfono de emergencias 112 -fue quien dio el primer aviso- y a tomar varias fotografías en las que se pueden apreciar las llamas en sus momentos iniciales, que se extendieron siguiendo la línea marcada por el tendido eléctrico. «No temía por nosotros, porque el viento soplaba en dirección contraria, lanzando el fuego hacia la montaña. Pero enseguida mi mujer y los niños se han puesto a gritar y a llorar como locos, así que nos hemos ido lo más rápido posible», sentenció.

A su juicio, la situación del terreno tuvo mucho que ver en el rápido avance del frente. «Toda la vegetación del monte bajo estaba completamente seca. Era un polvorín», concluyó.

Miguel, de 42 años, tomó algunas medidas, como avisar de la situación a los coches con los que se cruzaba para que dieran la vuelta. Además, se lamentaba de no haberse dirigido al balneario para dar la voz de alarma. «En el comedor habían centenares de personas, muchos mayores y familias con niños. Además no se veía ningún medio aéreo en la zona». Por último, destacó que tardó cerca de 40 minutos en cruzarse con las primeras brigadas.