Coches sin frenos en la Vall

La Vall ha vivido un fin de semana cargado de actos festivos. El sábado la jornada comenzó con la segunda competición de Autos locos sin motor que organizaba la Falla la Dula. Desde la calle Gómez Ferrer hasta la calle San Antonio estos coches de fabricación casera deleitaron a un numeroso público que se congregó para seguir la divertida carrera.

El equipo de la Penya Tot al Vol fue el triunfador al llevarse dos premios. Uno al coche más rápido y otro al más original. El galardón para el vehículo más gracioso fue para la Penya Fumata con su Papamóvil.

El premio al coche más trabajado fue para la Penya Dulasa con su coche de Papá Noel. La Panya Inter de Mitente se llevó la distinción al más pupas con su Equipo A.

Por la tarde, la Plaça Major de Tavernes se llenó para seguir la Crida que protagonizó la Fallera Mayor, Raquel Mafé, quien invitó a la población a disfrutar de la fiesta josefina. Junto a ella, en el balcón del ayuntamiento estuvo el alcalde, Jordi Juan, y el presidente de la Federació de Falles, Ximo Felis. Después de la Crida se realizó un castillo de fuegos artificiales que dio paso a una cena de gala en la que participaron unos 400 falleros de Tavernes.

El domingo la cita era la XVIII Matinal Motera de la Falla la Via. Pese a la amenaza de lluvia centenares de motos no faltaron a esta concentración en la que la organización dispuso un almuerzo, animación musical en vivo, atracciones para los pequeños, zona de venta de artículos moteros, una vuelta turística y una comida a base de paella.

Durante la matinal se recaudaron 1.600 euros para ayudar a Sonia, la pequeña de Bétera que nació con 16 malformaciones que no le fueron detectadas. También hubo un espacio para que los moteros pudieran colaborar con entidade locales como Càritas y Cruz Roja.