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Pasillo de la cuarta planta del hospital de Gandia, donde se desprendió el falso techo de escayola. :: LP
La Safor

El hospital de Gandia desvía a enfermos a Alcoy y Xàtiva para reparar el techo que se desplomó

El centro sanitario evita ingresar a pacientes en la cuarta planta para ultimar las obras de la cubierta del área de Medicina Interna

ÓSCAR DE LA DUEÑA

Jueves, 14 de marzo 2013, 13:28

El hospital Francesc de Borja de Gandia desvió ayer a varios pacientes a los centros de Alcoy y Xàtiva, tal y como pudo averiguar LAS PROVINCIAS. Al parecer, la dirección del recinto sanitario decidió que algunos de los enfermos que llegaron a través del servicio de Urgencias se internaran en otros hospitales con el fin de no ocupar habitaciones de la cuarta planta, que se vio afectada por el desplome de un falso techo.

Este accidente tuvo lugar el martes sobre las 7.30 horas. Cerca de una decena de metros de escayola del pasillo del área de Medicina Interna cayeron, llegando a afectar al familiar de un enfermo, sin causarle grandes lesiones. Este accidente no generó el traslado de los internos a otros centros, ya que no se produjeron daños en las habitaciones. Muchas de estas dependencias estaban ocupadas por tres pacientes con sus respectivas familias, como publicó ayer este diario.

Horas después de la caída del techo, el centro consideró que era recomendable no utilizar las habitaciones de esta planta que se quedaran libres con el fin de que las obras se realizaran con la mayor diligencia posible. Por este motivo, algunos de los enfermos que acudieron ayer al hospital de Gandia aquejados de alguna molestia grave y que requerían ser ingresados, se desviaron a los sanatorios de Alcoy y Xàtiva.

Estos hospitales públicos son los más cercanos a Gandia de gestión pública y no privada, como es el caso de el de Dénia o el de Alzira. Estos dos centros están en manos de empresas que perciben una cantidad por habitante y año para atender a los enfermos de su área de salud.

Por tanto, vecinos de la Safor acabaron ayer en Alcoy, en el hospital Virgen de los Lirios, a casi una hora de carretera, o en el centro Lluís Alcanyís, a unos 45 minutos de Gandia. El objetivo de estos desvíos de pacientes era dejar la cuarta planta vacía con el fin de ejecutar las obras de rehabilitación del techo con la máxima celeridad posible. Pese a esto, desde la Conselleria de Sanitat negaron cualquier tipo de saturación en el Francesc de Borja.

La reparación del falso techo que se desprendió este martes arrancó al poco del accidente. Si todo va bien, la mejora estará acabada esta misma tarde, por lo que no sería necesario desplazar a nuevos enfermos, al menos a partir de esta noche.

Desde la Conselleria confirmaron a última hora de ayer estos desplazamientos. Indicaron que fueron tres a Xàtiva; uno a Alzira, «cumpliendo con la voluntad del paciente», y otros tres al centro hospitalario de Alcoy. También se remitieron cuatro enfermos al hospital Doctor Peset Aleixandre de Valencia. «Esta medida es provisional y transitoria y afecta a menos del 10% de los ingresos diarios», agregaron.

Precisamente, en la mañana de ayer, el sindicato Unión General de Trabajadores (UGT) denunció que se estaban dando «altas a los enfermos de forma masiva», como explicó el responsable del colectivo, Antonio Agustí, quien agregó que tanto «familiares de internos como empleados del hospital» confirmaban estos argumentos.

Agustí lamentó la falta de planificación del centro, ya que la caída de una parte de un falso techo «está obligando a dar altas y a cerrar habitaciones». Todo esto ocurre, prosiguió, pese a que desde la Generalitat negaron que se fueran a cerrar dependencias o a trasladar enfermos como consecuencia del accidente en la planta de Medicina Interna. Sobre estas acusaciones también se manifestaron desde el Consell. Aseguraron que las altas se dan «siempre bajo criterios médicos y no bajo ninguna otra razón».

El hospital Francesc de Borja arrastra accidentes de este tipo desde hace años. No es la primera vez que se desprende parte de un techo. En otras ocasiones ha dejado de funcionar el aire acondicionado o se han producido desperfectos en tuberías.

De hecho hace pocos días se tuvo que poner en marcha una obra de urgencia en la Unidad de Cuidados Intensivos (UVI), ante el peligro de que se desplomara el techo. Esta actuación, según parece, concluirá este fin de semana.

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