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CARLOS LÓPEZ
Jueves, 25 de abril 2013, 11:43
El abandono de mucho de los terrenos de cultivo de los municipios parece estar en el origen de la plaga de conejos de montaña que ha arrasado los campos de vid de Gata de Gorgos.
Hace unos días, un grupo de jóvenes agricultores comprobaron que numerosas cepas que ahora están en pleno proceso de floración, habían sido arrasadas y, en algunas de ellas, ya no quedaba ni un solo brote verde, con lo que se han echado a perder.
Todavía no han cuantificado las pérdidas generadas por esta acción, pero para evitar males mayores, decidieron reclamar al ayuntamiento que interviniera de urgencia.
Así, concertaron una reunión con la alcaldesa, Ana María Soler, y tras comprobar en dos de las partidas más afectadas (Julians y Ecles) los efectos de esta plaga, decidieron poner en marcha la petición de un permiso especial de la Conselleria de Medio Ambiente para el control de la misma.
Soler detalló que remitieron a ese departamento un amplio expediente con numerosas fotografías para demostrar la dureza de una plaga de conejos que ha podido echar a perder toda la cosecha de uva de la localidad.
Por ello, solicitaron un permiso para el control de la plaga. Así, la Conselleria en «escasas 24 horas» concedió la autorización preceptiva a la Sociedad de Cazadores de Gata para que 'controle' la plaga de conejos de montaña que ha arrasado varias zonas del municipio.
La alcaldesa afirmó que el permiso se ha concedido hasta el 15 de junio y remarcó que se hace dentro del coto de caza de la población.
Además, destacó que «el uso preferente para el control de la plaga es la presencia de hurones» y solo se emplean armas de fuego «cuando es imprescindible», subrayó Ana María Soler.
Los hurones se han convertido, según algunos foros de caza de internet, en la modalidad más adecuada para el control de las plagas de conejos.
Según uno de ellos, «los hurones permiten que los conejos se dispersen y por tanto su acción destructora -sobre las plantas- es mucho menor». También recoge que la caza del conejo con esta modalidad «requiere tranquilidad y paciencia ya que se cansan mucho».
Según los datos recogidos por el ayuntamiento, se podrían haber cazado más de 200 conejos y la cantidad aumentará ya que los campos están llenos de madrigueras.
Bando de la alcaldesa
Para evitar la presencia de los conejos y otros roedores, la alcaldesa dictó un bando en el que amablemente invita a todos los propietarios de terrenos abandonados a que los mantengan limpios «no solo en verano».
En el anuncio asegura que la proliferación de animales producen «un gran daño a la agricultura local al formarse plagas como esta que temporadas cruciales para el buen desarrollo y crecimiento de las plantaciones (como las viñas)».
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