El British cederá a los vecinos de Paterna sus instalaciones deportivas el próximo curso

Una zona ajardinada, instalaciones deportivas y un aparcamiento de uso público. Éstas son las prestaciones que ganarán los vecinos de La Cañada de Paterna el curso que viene, según informaron ayer a LAS PROVINCIAS fuentes del ayuntamiento de la ciudad. Se trata de las infraestructuras que el British College, en un convenio firmado en 2009, se comprometió a construir como contrapartida a su establecimiento en la zona para cederlas a los ciudadanos, pero que, tal y como denunció ayer la coalición Compromís, todavía no se han llegado a acometer.

La concejala de Urbanismo de Paterna, María Villajos, se reunió ayer con la dirección del centro para tratar este tema. Tras el encuentro, que se repetirá la semana que viene con la presencia del alcalde, Lorenzo Agustí, el consistorio explicó que «se está trabajando para conseguir la cesión del espacio lo antes posible», y fijó la entrega, «tras dos años de retraso», para «el curso que viene». Las instalaciones deportivas constarán, al menos, de una pista de fútbol sala y otra de baloncesto, y podrán ser utilizadas por los vecinos fuera del horario escolar.

«A ambas partes nos conviene solucionarlo. El colegio tiene más proyectos en mente y quiere solventar lo que le queda pendiente», indicaron en alusión a unas nuevas obras de ampliación que pretende realizar el centro escolar de La Cañada. Asimismo, explicaron que el retraso de esta entrega se debe a «problemas burobráticos». «El convenio fue aprobado, pero tuvo que ser modificado y eso retrasó los trámites», argumentaron.

La versión de los hechos de Compromís per Paterna sostiene que el British College pidió una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y que ofreció a cambio una parcela. «Tras ser aprobada esta modificación se descubre que que la parcela en realidad la podrá usar el British cuando la pida», según el portavoz de Compromís, Juanma Ramón, motivo por el cual se pone en marcha un nuevo convenio para que el ayuntamiento pueda disfrutar de este terreno, «un texto que todavía no se ha firmado».

«Pero mientras, el colegio británico ya tiene la modificación del PGOU aprobada y puede construir más, pidiendo un estudio de detalle para hacer un edificio de secundaria», criticó Ramón. «Seguimos igual que al principio: sin convenio, sin jardines ni instalaciones y sin mejoras en pluviales», dijo.

«Nos queda claro que el British no ha cumplido su parte y que el Ayuntamiento no ha ejercido su obligación de exigencia de lo aprobado», criticó el grupo de la oposición, que añadió que «mientras gana el centro privado, continúan las carencias de equipamiento en el barrio», unas carencias que, según replicó después el ayuntamiento, por fin serán una realidad el curso que viene.

«Cuando en enero de este año nos enteramos de que el centro quería ampliar instalaciones, sin cumplir el convenio, hicimos un requerimiento al alcalde Lorenzo Agustí para que les exigiera de una vez hacer efectivos los compromisos adquiridos en 2009», añadió Ramón. «Y también proponemos que, con cargo al colegio, se realicen las mejoras en pluviales tan solicitadas por los vecinos para solucionar las inundaciones de la calle 232 de la Canyada», concluyó.