El centro de salud de Orriols abre con cuatro años de retraso

Cuatro años llevaban los vecinos del barrio de Orriols esperando que llegara el día de ayer, la fecha en la que por fin se abrió el centro de salud que tendría que haber estado terminado en 2009. Las consultas ya funcionan, y el consultorio prestará servicio a los vecinos de los barrios de Orriols, Torrefiel y San Llorens, unos 8.500 ciudadanos en total.

La lucha de los vecinos con la Conselleria de Sanidad para que se terminara la construcción del centro ha sido larga pero, tras su primer éxito, aún quedan asuntos pendientes. Ahora reclaman que el complejo incorpore todos los servicios sanitarios que la Conselleria calculó como «necesarios» en el proyecto inicial, explicó la presidenta de la Asociación de Vecinos de Orriols -Rascanya, Maica Barceiro.

«La mitad del edificio está vacío porque faltan muchos de los servicios y personal prometidos», destacó la presidenta. Servicios como el de matrona, fisioterapia, enfermeros para extracciones, rehabilitación, control de sintrón o trabajador social. A pesar de que están «muy contentos» de que esté abierto, no pararán sus reivindicaciones «hasta que esté en las condiciones que garantizaron», asegura Barceiro.

Apertura sin inauguración

La información que tiene el propio personal del centro de salud es que en septiembre llegarán todos los profesionales necesarios para prestar estos servicios. Aún así, tras tantos años de promesas incumplidas, Barceiro aseguró que ellos hasta que no lo vean, no lo creerán.

El consultorio abrió ayer a pesar de que la inauguración oficial será en septiembre. Esto se decidió en la reunión que mantuvieron los vecinos con el subsecretario de Sanidad, Ignacio Ferrer, y la concejala de Sanidad, Lourdes Bernal, a mediados del mes de julio. En ella, la asociación demandó que se abriera el centro, viendo que ya estaba todo preparado, y que se ofreciera atención cuanto antes. «A nosotros la inauguración nos da igual, lo que nos importa es poder acudir a consulta si tenemos algún problema», comentó Barceiro.

Una historia de obstáculos

Tras años persiguiendo la construcción de un nuevo centro de salud, en 2008 comenzó la ejecución del edificio. Las obras finalizarían un año después y el presupuesto sería de dos millones de euros.

Las cosas se complicaron y, al final, han sido cuatro años los que ha costado terminar el proyecto. La empresa constructora quebró en dos ocasiones, se produjeron robos de material y cobre de la obra y el dinero destinado a este fin en los presupuestos de la Generalitat desaparecía a mitad año. «Lo que más rabia nos daba era que en la partida presupuestaria de todos los años aparecía el centro de Orriols, y llegado septiembre desaparecía», comentó la presidenta de la asociación.

El centro de salud, -así es como aparecía en la documentación del proyecto-, ha sido llamado finalmente consultorio auxiliar Arquitecte Tolsá y está situado en la calle que recibe su mismo nombre, aunque este hecho «no cambia nada», concluyó Barceiro.