Unos vándalos asaltan la piscina cubierta de Tavernes

La piscina cubierta de Tavernes de la Valldigna ha sido asaltada por un grupo de vándalos. Los intrusos han destrozado cristales de las pistas de pádel, han arrancado cables de la instalación eléctrica, han roto placas de la talla que hay en el techo y han arrasado con las puertas, que han tenido que ser selladas con tablones.

Además se han producido pintadas en este inmueble que desde hace dos años permanece cerrado por el concurso de acreedores de la empresa promotora de las obras y la explotación de la piscina. Se veía venir que algo parecido tenía que pasar con la piscina, ya que se encuentra en una zona periférica de Tavernes de la Valldigna por la que hay muy poca circulación, lo que sin duda ayuda a que sea un blanco fácil para los gamberros.

Desde que la empresa AquaTavernes se decretó en concurso de acreedores la instalación está cerrada y no hay novedades sobre ella. El problema radica en la falta de liquidez de la empresa adjudicataria. Harían falta unos 300.000 euros para poder inaugurar esta piscina que ya está prácticamente acabada.

Recientemente LAS PROVINCIAS publicó que había de tiempo hasta esta temporada estival para abrir la piscina. El próximo verano se acaba el periodo que los acreedores firmaron para demorar la deuda que tienen respecto a la empresa concesionaria.

A partir del verano se deberían ir pagando las deudas, y para que se dé esta situación la piscina tiene que estar en funcionamiento para generar ingresos.

El gobierno vallero ha pedido a la Diputación que conceda una ayuda a la piscina. Por su parte el ejecutivo ya indicó que no iban a hacer ninguna aportación porque el Consistorio Municipal había cumplido con lo acordado en el acuerdo de construcción de la piscina.

Así pues, la piscina permanece cerrada, a la espera que se pueda dar alguna novedad. Mientras el abandono se apodera de ella y el asalto de los gamberros no hace más que poner otra traba más a su apertura.

Tavernes había demandado una piscina cubierta, y pese a estar acabadas las obras, la instalación no puede abrirse al público hasta que no se solucione la falta de liquidez de la empresa adjudicataria.

La piscina vallera es una moderna instalación con cuatro pistas de pádel, tres zonas polivalentes para actividades de gimnasio, una piscina de 25 metros y otra terapéutica de chapoteo, así como una cafetería y una zona de spa.

Los agentes policiales de la Vall buscan ahora a los gamberros que han dejado el recinto deportivo como si hubiera acontecido una batalla campal.