Alicante se presenta para ser sede de las Series Mundiales de rugby 2016

El Ayuntamiento de Alicante ha presentado su candidatura a la International Rugby Board (IRB) para albergar las Series Mundiales de este deporte en 2016, que vienen a ser como una alternativa a la Copa del Mundo para este deporte, que tanto predicamento tiene en las islas británicas, uno de los principales mercados de turistas de la Costa Blanca. Así lo ha anunciado la Federación de Rugby de la Comunidad Valenciana y ha podido contrastar este periódico de fuentes municipales.

En este torneo participan las mejores 16 selecciones de rugby a nivel mundial, desde Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda a Australia y Nueva Zelanda, aunque en la variedad de siete contra siete, no con quince componentes por equipo, que es la usual en competiciones de gran calado como puedan ser las Seis Naciones o la propia Copa del Mundo.

Estas Series Mundiales servirán para ganarse un puesto en las Olimpiadas de Río de Janeiro 2016, en las que este deporte entrará como de exhibición, previa a su inclusión en la competición. Cuatro selecciones se clasificarán en las Series Mundiales 2014-2015, que es a las que aspira Alicante. En cada uno de los nueve torneos regionales se concederá una plaza más; y obtendrá también billete el equipo que gane una eliminatoria mundial. Con Brasil, organizador de la Olimpiada, completarán el cupo que lucharán por las medallas olímpicas.

Actualmente las sedes de la Series Mundiales son Dubai, Hong Kong, Puerto Elizabeth (Suráfrica), Wellintong (Nueva Zelanda), Gold Coast (Australia), Las Vegas, Tokio, Glasgow y Londres. La International Rugby Board, con sede en Dublin, decidira a finales de 2014 qué ciudad organiza la última de las diez sedes de la competición. En total, se han presentado 25 ciudades, entre ellas Alicante, para conseguir la plaza.

No es la principal competición de la especialidad. No obstante, su tirón es innegable. De hecho, la Concejalía de Deportes ha presentado el estadio José Rico Pérez como sede para albergar la última fase de la competición, que incluye la final. Tal es la importancia que se le dan a estas Series Mundiales.

El campo de fútbol del Hércules CF podría llenarse si, por ejemplo, fuera una final entre Inglaterra e Irlanda, países con buenas conexiones aéreas con el aeropuerto de Alicante-Elche. Baste recordar el impacto económico que se produjo en la ciudad cuando la selección española de fútbol jugó un partido contra Escocia. La hinchada foránea llenó durante dos días los establecimientos y las calles de la ciudad, dejando un buen pellizco.

Sería algo parecido, pero durante una semana entera, con lo que supondría de empleos directos e inditectos en el turismo.

Pellizco económico

La Federación de Rugby de la Comunidad Valenciana calcula que este torneo atraería a Alicante a unos 25.000 espectadores, la gran mayoría británicos, con un impacto económico de unos 25 millones de euros directos en la ciudad durante una semana. Tirando por lo bajo, puesto que otras fuentes apuntan a más de 35.000 espectadores que se desplazarían para poder ver esta competición en directo.

De hecho, el impacto mediático que tendría si finalmente se concede a Alicante la organización del torneo es innegable, lo que equivale a una promoción gratuita de las bondades de la ciudad. La audiencia media por televisión de este acontecimiento deportivo es de 321 millones de espectadores, más todos los impactos en internet, incuantificables.

Serviría para llevar el nombre de Alicante, literalmente, a la otra parte del mundo. Ciudadanos de Australia y Nueva Zelanda verían a los 'Wallabies' y a los 'All Blacks', apodos de estas selecciones, en tierras alicantinas, un importante punto de promoción turística, cuyo coste económico sería inasumible para el Patronato de Turismo.