El circuito de Fórmula 1 acoge carreras ilegales en el Grao por la rotura de una valla

Entre el puente de Astilleros y un edificio de la Generalitat. Por ahí se cuelan cada noche gracias a la rotura de la valla metálica los coches que recorren el antiguo circuito de Fórmula 1 por el Grao. La asociación de vecinos dio la voz de alarma para que se eviten los posibles accidentes, al carecer toda la zona de alumbrad público.

Las instalaciones contaban con farolas, aunque el cable acabó siendo víctima de los saqueos continuos, al igual que buena parte de los elementos metálicos que dejó la empresa organizadora de las carreras. De ahí, indicó ayer el presidente vecinal, Jesús Vicente, que lo más indicado sea la retirada completa de la verja metálica en todo el trazado.

Los residentes reivindican desde que se celebró el último Gran Premio, allá por 2012, la liberación total de los solares para que sean utilizados de manera provisional como zona de paseo y juegos. En otros barrios se ha permitido la colocación de columpios, incluso arbolado plantado por los propios vecinos.

Esto no se hará en el Grao, donde el Ayuntamiento no ha realizado ningún movimiento a favor de esta iniciativa, ni siquiera por el beneficio de abrir la pasarela peatonal 'Cuc de llum' del viejo cauce. Esta estructura de hormigón y madera fue construida para ofrecer un acceso a los espectadores de esa parte del circuito, aunque también ha sufrido el expolio de materiales.

La valla tirada en el suelo carece de los habituales bloques de hormigón que pueden verse en el resto del perímetro del circuito. De ahí la facilidad con que han sido arrancados varios tramos de la base. El asfalto está en perfectas condiciones porque no se ha utilizado salvo para las carreras de Fórmula 1, a diferencia del itinerario que rodea la Marina, integrado en el callejero como una calzada más para todo tipo de tráfico de vehículos.

Otra cosa bien distinta es el paso inferior y otras zonas de la instalación, donde la lluvia ha hecho estragos por la acumulación de barro y todo tipo de suciedad. Los residentes llegaron a denunciar hasta un foco de larvas de mosquitos, lo que ahora se corre el riesgo de repetir por la llegada del calor veraniego.

El Ayuntamiento ha intentado acelerar la urbanización del nuevo Grao, donde se han previsto más de 3.000 viviendas, aunque la crisis económica ha provocado el concurso de acreedores del consorcio que tenía la mayoría del suelo.

Aún así, la empresa municipal Aumsa ha recibido una oferta del sector privado para financiar hasta con 38 millones de euros las obras de urbanización. La entidad todavía no ha realizado la adjudicación, que llevará como compensación la entrega de parcelas o la devolución del crédito dentro de unos años.

Este proceso se encuentra totalmente abierto dado que el plazo de presentación de ofertas acabó hace una semana. Con este dinero se conseguirá liquidez para encargar las obras, además de la elaboración del propio proyecto, nacido en un concurso de ideas con motivo de la Copa América y que ganaron el francés Jean Nouvel y el despacho alemán de arquitectura GMP.

La Generalitat adelantó el dinero para la urbanización del circuito, que en realidad pagarán los propietarios de los solares al ser calificados como una carga urbanística. En total, algo más de 45 millones de euros, que avala el Consistorio en el convenio firmado hace años.