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CHEMA BERMELL
Domingo, 7 de agosto 2016, 23:21
«Me drogué por primera vez con mis amigos, estaba de moda tomar heroína». Así comienza la historia F. O., un hombre de 52 años residente en Manises que empezó a consumir drogas a los 17 años. «En esta vida he tomado cocaína, heroína, éxtasis, cristal, speed...». La lista de sustancias que ha consumido es larga, al igual que la de penas que ha vivido. «Me pasaba la semana solo en casa», explica F. O. Las horas del día las pasaba «intentando conseguir dinero para consumir más». Su límite llegó cuando empezó a «sufrir depresiones y a tener ideas suicidas». Confiesa que en una ocasión intentó quitarse la vida. Sin embargo, F. O. sigue luchando contra su adicción. «Necesitaba ayuda, yo solo no podía». Con el apoyo de su familia ingresó en febrero de este año en uno de los centros de día de Proyecto Hombre. Desde entonces no ha consumido ninguna droga. «Lo he dejado por mi hijo y por mí», explica. «Quiero bailar y hacer teatro», son los planes que tiene ahora F. O., seguir el camino de su hijo que estudia arte dramático. Acaba su historia contando lo que más desea en la vida: «Quiero estar con mi hijo y quiero estar bien».
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