Secciones
Servicios
Destacamos
P. M.
Sábado, 21 de enero 2017, 00:21
Uno de los apartados del Libro Blanco, otro de los documentos que maneja el Consorcio para relanzar la Marina, trata sobre la propia reorganización de la entidad, donde se propone un cambio de los estatutos actuales. La clave está en la retirada del derecho de veto del Gobierno a cualquier medida que se tome, lo mismo que el número de consejeros por cada uno de los tres socios.
Desde su fundación, el Consistorio ha tenido el 20% de los votos, mientras que la Generalitat mantiene el 40%, la misma cifra que el Ejecutivo. La norma establece no obstante que todas las decisiones deben establecerse por unanimidad. De todos modos, queda el derecho de veto.
Este blindaje del Gobierno es un problema casi diario a la hora de gestionar. La comisión ejecutiva, el órgano inferior al consejo rector, apenas tiene capacidad de maniobra porque maneja presupuestos muy cortos, lo mismo que ocurre con las concesiones.
El mismo Llorens dijo que el proceso del plan estratégico debe pilotarlo el Consistorio. Será una de las cuestiones de fondo en la negociación de la deuda, pendiente con el nuevo Gobierno.
En el entorno de la Marina, siguen las negociaciones con el Club Náutico para su traslado. Como publicó LAS PROVINCIAS, la opción que se baraja es la actual terminal de cruceros de Transmediterránea, una vez entren en servicio los nuevos amarres de la ampliación norte. La operación se completaría con los solares ahora ocupados por los astilleros de Boluda, en desuso y que podrían revertir al Puerto. No obstante, esta iniciativa está pendiente de cuajar y requiere todavía varios trámites.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La víctima del crimen de Viana recibió una veintena de puñaladas
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.