Bastoncillos y madejas de hilo dental atascan el alcantarillado de Valencia

valencia. Las cifras de la extracción de toallitas compactadas del colector norte asustan. El gasto de la limpieza supera los dos millones de euros y hace ya tiempo que se rebasaron las 600 toneladas transportadas en camiones a vertederos controlados. Pero no es el único peligro para el correcto desagüe en la red de colectores y alcantarillado de la ciudad. Utensilios tan domésticos e inofensivos como los bastoncillos de los oídos y el hilo dental se han convertido también en material de alto riesgo para que discurra el caudal de aguas negras hasta la planta depuradora de Pinedo.

Fuentes municipales subrayaron ayer la incidencia que tienen estas piezas y el hallazgo cada vez más frecuente de madejas de residuos en las tuberías. Como ocurrió en el caso del colector norte, estos artículos no tienen tiempo material para que desaparezcan, entre otras cosas porque no son biodegradables.

El alcance del perjuicio de tirar por el desagüe del retrete bastoncillos e hilos dentales se mide en miles de euros. El Ayuntamiento destina cada vez más recursos para el mantenimiento de la red de alcantarillado. Los presupuestos municipales, que pasarán hoy por el pleno para su aprobación, indican que el área del Ciclo Integral del Agua se llevará 14,36 millones de euros, una cantidad similar a la inicial de este ejercicio pero que se beneficiará con seguridad de las modificaciones de crédito a lo largo de 2018.

La limpieza del colector norte no ha terminado ni mucho menos. El último añadido fue incorporación un grupo de ventiladores para airear mejor el interior de las tuberías, donde entran los operarios provistos de máscaras antigás para poder trabajar con condiciones de seguridad.

Faltará todavía conocer al detalle el estado del colector desde el viejo cauce hasta la planta depuradora de Pinedo, donde se han realizado catas para comprobar los embozos de toallitas. El Consistorio aprobó una moción para pedir a los fabricantes que incorporen mensajes de concienciación en el envoltorio de este producto, para que sean tirados en el cubo de la basura en lugar del retrete, que emboza las conducciones generales con mucha frecuencia.

En el caso del colector norte la situación era especialmente preocupante por entrar aguas residuales en la parte superior, destinada al desagüe del caudal de lluvia. La extracción se realiza con pequeñas excavadoras y también se han utilizado camiones cuba de gran potencia para deshacer los tapones de más de una tonelada de toallitas en los lugares complicados.