Desalojada una vivienda con okupas en el Cabanyal tras un incendio

Un incendio en la conocida como casa de los payasos en el Cabanyal ha permitido al Ayuntamiento de Valencia recuperar la vivienda, que es de propiedad municipal, pero se ha saldado con tres policías heridos por un violento okupa con antecedentes delictivos.

En la casa vivía un grupo de jóvenes del movimiento okupa desde hace varios años, aunque ninguno de ellos ha resultado herido. El fuego se inició sobre las 11.35 horas de la mañana en el número 170 de la calle Padre Luis Navarro.

La policía ha impedido que uno de los okupas accediera a la casa mientras los bomberos extinguían el fuego. Fueron momentos de gran tensión y nerviosismo, ya que el joven ofreció resistencia y causó lesiones a dos policías locales y un policía nacional. Tras un forcejeo, los agentes han reducido, engrilletado y detenido al okupa. Además, este individuo ya ha sido arrestado otras dos veces por agredir a otro policía y por falsificar un documento que autorizaba la celebración de una fiesta, según informaron fuentes del Ayuntamiento de Valencia.

Cuatro patrullas de la Policía Local y un quincena de bomberos acudieron con urgencia al incendio. También se desplazaron varias patrullas de la Policía Nacional. Tras sofocar las llamas, los bomberos informaron a la policía sobre el estado de ruina del inmueble, y entonces los agentes impidieron que los jóvenes volvieran a entrar en la vivienda. En marzo de 2016 ya se produjo otro incendio en esta casa y los okupas impidieron el acceso a los primeros policías que llegaron a la calle Padre Luis Navarro.

La casa de los payasos o 'payo-asos' es utilizada por los okupas como un centro social para enseñar a realizar malabares y otras disciplinas circenses. El Ayuntamiento de Valencia estaba esperando una resolución judicial que permitiese desalojar a los okupas, pero la coordinación entre los bomberos y la Policía Local ha permitido resolver la situación, según han informado fuentes de la Concejalía de Protección Ciudadana.

Un oficial del Servicio Municipal de Bomberos de Valencia ha constatado que el edificio no reúne las condiciones mínimas de habitabilidad. Por ello, una brigada municipal ha tapiado esta tarde la puerta y las ventanas. Además, la policía vigilará durante unos días la casa para evitar una nueva ocupación ilegal.