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M. A. F.
Sábado, 1 de marzo 2008, 04:27
El pregón de la Semana Santa Marinera de Valencia tuvo lugar ayer en la parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles y contó con la asistencia, entre otras autoridades, del obispo auxiliar de Valencia, Esteban Escudero.
Francisco Arnau, consejero de Trabajo y Asuntos Sociales de España ante la Organización Internacional del Trabajo, tras recibir la medalla de plata que le fue impuesta por la presidenta de la Junta Mayor, Begoña Sorolla, tomó la palabra y entre otras cosas dijo: "Ahora, cuando Valencia parece admitir su olvido y acordarse del Grao, la Malvarrosa y el Cabanyal, todavía se está quedando corta a la hora de evitar su degradación. No creo que lo que más interese a los poblados marítimos sean Fórmulas Uno, fueran estas del Mar o del Aire".
También destacó que Valencia ha vivido de espaldas al mar, y dijo: "Ha vivido de espaldas a vuestra vida y al mar, por mérito y deber de bondad os ruego que no se lo tengáis en cuenta". Después de relatar la antiguedad de la Semana Santa, diferenció los conceptos de cristiandad y cristianismo.
"La cristiandad separa a los pueblos mientras que el segundo los une mediante el lazo de una filosofía de vida basada en el bien y en la bondad. Me quedo con el modelo del cristianismo y no comparto el de cristiandad".
Aludió a aquellos que ostentan laureles y entorchados de jerarquia, "ellos deben percibir nítidamente que su mensaje y sus actos o se sustentan en valores religiosos como la bondad de Cristo o no llegarán a ser entendidos"
Finalizó leyendo unos versos de Rafael Alberti, dedicados a la insignia marinera. En la primera parte del acto se ofreció un recital musical a cargo del Trío Acorde.
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