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M. ANDRÉS FERREIRA
Miércoles, 12 de marzo 2008, 03:46
Desde siempre las comisiones de falla han deseado informar con mayor o menor intención de todos y cada uno de sus actos festivos, así como de sus ilusiones, su historia y posibles logros futuros.
Documentalmente se conoce el primer periódico fallero, que bajo el título de editaron los falleros de la calle Maldonado. Esta publicación permaneció hasta 1901, fecha en que su cabecera cambia por .
En el año 1908 aparece , editado en la calle Torno del Hospital, al precio de cinco céntimos, eminentemente fallero y satírico. En sus páginas se podía encontrar de todo, desde los poemas más encendidos hasta la crítica más mordaz, no sólo de la fiesta de las Fallas sino de la vida ciudadana muy bien camuflada.
fue otro de los periódicos que nació para el mundo fallero en el año 1891 en la calle Na Jordana, al que le siguió en 1892 y 1894 y , a cargo de los falleros de las calles Gracia-En Sanz.
En el año 1904 la comisión de las calles Pilar-Sequiola sacan a la luz su diario . Después de una serie de altibajos, en los que algunas publicaciones sobreviven y otras van desapareciendo, nació en 1925 , editado por la falla de la calle de la Paz en colaboración con el Círculo de Bellas Artes; esta excelente colaboración hizo que plumas de la talla de Hernández Casajuana; Morales San Martín y el escultor Benlliure plasmaran sus más bellos trabajos literarios sobre la fiesta de las Fallas.
La veterana comisión de la plaza del Mercado Central editó una revista que denominó. La falla de la entonces plaza del Caudillo, editó OF. IN. FALL, que no era más que su órgano de información diario, del que se llegaron a editar hasta tres ediciones diarias con la colaboración del charlista García Sanchiz, bajo la dirección del historiador Francisco Almela y Vives.
Entre otras destacadas publicaciones, también estaba , editado por los falleros de la plaza del Ángel. Hoja fallera editado por la comisión de Convento Jerusalén en 1945 al que le siguió Glosa.
En el año 1946 aparece editado por la Junta Central Fallera, al que le siguió lo que hoy conocemos, con algunos cambios, por.
La Junta creó un boletín informativo, en el que se intentaba dar cuenta de las actividades del organismo fallero, y decimos dar cuenta, porque no todas las actividades se reflejaban.
En sus comienzos contó con una serie de colaboradores, con carácter honorífico, entre los que destacamos a Bernardo Bono y Barber, Salvador Chanzá, Ángel Villena, Ricardo Dasí, Andrés Sevilla, Jesús Maroto y José Calatayud, entre otros.
Entre las secciones destacadas, se encontraba el buzón de sugerencias abierto al mundo fallero. ¿Qué pasaría ahora si se abriese de nuevo el buzón? ¿Qué denuncias se harían aprovechando el anonimato?
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