Barreda anuncia que recurrirá la venta de agua en los tribunales

El Gobierno de Castilla-La Mancha que preside José María Barreda se opondrá por vía institucional y, si es necesario, por la judicial a la operación de venta por regantes de Villena de agua de un acuífero a la multinacional Danone para que la embotelle.

Así lo indicó ayer el vicepresidente primero de la Junta, Fernando Lamata, cuando se le preguntó si ya han obtenido respuesta a las cartas que ha enviado el Ejecutivo regional al Ministerio de Medio Ambiente y a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) oponiéndose a esa operación. Agregó que ha habido alguna conversación, pero no una respuesta formal, y reiteró que el Gobierno regional no va a aceptar una "operación de especulación con un recurso que es de todos", como el agua.

Al respecto consideró que los valencianos tienen que tener agua para beber en todo caso, como así ocurre en Alicante, donde recordó que "hoy beben agua de Castilla-La Mancha, del Tajo". Por el contrario, a Lamata no le satisface que se envíe agua a un lugar para que luego vendan la que tienen allí embotellada, como quieren hacer en Villena, donde se ha venido demandando el trasvase de aguas del Júcar al Vinalopó.

En su opinión, no sólo el Ministerio y la CHJ deben frenar esa "operación especulativa", sino que también instó a Camps a que la rechace, "como esperan muchos valencianos", pues considera un "escándalo" que se aprovechen recursos del Júcar, una cuenca que, según recordó, ya está castigada, para derivarlos al Vinalopó mientras en esa zona venden el agua que tienen para embotellarla.