Darek se viste de romano

Yo soy el malo de la película", decía ayer Darek, el ex de Ana Obregón. Le contestaba Miki Molina, el que también fuera 'amigo' de la bióloga: "No, yo soy más malo, que soy Judas". Miki Molina y Darek comparten protagonismo en la película , la opera prima de Miguel Ángel Fabré, y que se está grabando estos días en Alfafar. Darek apareció ayer en la presentación de la cinta en el ayuntamiento de Alfafar vestido de negro de la cabeza a los pies. Era día de mercado, y las mujeres que volvían a casa con el carro de la compra se volvieron locas cuando vieron al modelo por la plaza de su pueblo. "¿Ese es el de la Obregón?", se preguntaban, mientras corrían a buscar un autógrafo o una foto a su lado para enseñárselo, quizás, a sus hijas. Durante la presentación, ni siquiera se quitó la chaqueta y tampoco se mostró tal y como aparece en la película, vestido de romano, en un papel que le viene que ni pintado, de malo, mostrando su cuerpo que tan locas vuelve a miles de mujeres. Darek habló muy poco en la presentación. "Estoy muy ilusionado con el proyecto", dijo el ahora actor, que ha sabido aprovechar bien la fama que le ha dado ser durante un tiempo el consorte de la todoterreno Obregón. Sin embargo, añadió que a su familia en Polonia no le ha hecho gracia su papel. "Les mandé unas fotos y no les gusta que haga de malo". Fueron sus únicas palabras. La cinta, que se desarrolla en el momento actual y también en la época de Jesucristo, se graba en Madrid, Almería y varios municipios de Valencia, entre ellos Benissanó, Alfafar y Massanassa. En esta última localidad convirtieron el ayuntamiento en una escuela, y en Alfafar, la casa consistorial es una comisaría. No podrán rodar en iglesias y tendrán que irse al extranjero, pese a que la película lo requiere, porque el tema es polémico: clonar a Jesucristo utilizando la Sábana Santa. En la cinta, de acción, participan también Verónica Mengod, Vanessa Romero o Pedro Peña. El polaco ha dado el salto a la gran pantalla. Después de protagonizar portadas con poca ropa, mostrarse por las pasarelas y hacer su aparición en fiestas, había hecho algún papel, por ejemplo, en la serie . Ayer por la tarde, unas dependencias del ayuntamiento se cerraron para la grabación. No hubo público, quizás queriendo evitar avalanchas de fans. Pero seguro que decenas de vecinas del municipio no querrán perderse hoy el rodaje. Darek se ha convertido en la estrella. Mientras, Miki Molina, polémico como siempre, preguntó si "se puede fumar" y encendió dos cigarrillos en un espacio sin humos. Y admiró la biblioteca municipal. "Me encantaría vivir en Alfafar", aseguró el actor.