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A. VIDAL
Martes, 17 de marzo 2009, 04:00
El CBM Parc Sagunt cayó derrotado por 39 a 33 en el partido de ida de los cuartos de final de la Recopa de Europa que se disputó la tarde del domingo en la localidad noruega de Skien. Las jugadoras entrenadas por Cristina Mayo pagaron excesivamente caras sus bajas y el infierno que les supuso llegar hasta Skien tras más de 17 horas de desplazamiento con avería del autobús incluida y una temperatura de cinco grados centígrados bajo cero en la noche del sábado mientras esperaban llegar al hotel, sobre las dos de la madrugada. Macarena Aguilar y Verónica Cuadrado no pudieron vestirse de corto tras resentirse de sus diferentes lesiones. En el caso de la manchega, los médicos del club descubrieron que llegó de la convocatoria con la selección con una tendinitis, mientras que la cántabra, está ultimando su reaparición a las canchas para alivio de las saguntinas. Las jugadoras locales salieron más entonadas y desde el principio demostraron que tenían estudiados los movimientos tácticos de las hispanas. Así, las primeras ventajas cayeron por el bando nórdico con un juego rápido y certero. Al descanso se llegó con un 19 a 15 que dejaba al Parc Sagunt con el agua al cuello y sin demasiado oxígeno en el banquillo por la escasez de plantilla y las bajas mencionadas. En la segunda mitad, la diferencia iba en aumento hasta que otra de las tocadas, Noelia Oncina, saltó al rescate de las suyas a pesar de su lesión. De esta manera, se frenó la sangría que parecía avecinarse a las locales, y se estableció la desventaja en seis goles, una renta que obligará a las saguntinas a volver a exprimirse hasta la extenuación en la vuelta, que será el sábado que viene. La mejor, Benzal La mejor de las saguntinas en la ida de esta doble confrontación fue Nuria Benzal. La joven andaluza se cargó a sus espaldas el peso de su equipo y lideró el ataque con 13 goles. Eli Chávez y Bea Escribano fueron las que mejor secundaron a Benzal con un aporte de aire fresco que al final agradecieron las visitantes, y también con ocho goles entra las dos jugadoras. En términos generales las noruegas llevaron el peso del partido, aunque por fortuna para las de Mayo el capítulo final de esta eliminatoria se escribirá en tierras valencianas, y en principio, con más efectivos. Las de Mayo tratarán de repetir la gesta de Moscú y volver a golear a un rival que se les atragantó en la ida. Esta vez, sin arrastrar una odisea de viaje de 17 horas de duración y cuatro trasbordos.
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