Un ribera de 4,45 millones de euros

De récord. José de Ribera (Xàtiva, 1591-Nápoles, 1652) ha dado un salto vertiginoso en el mundo de las subastas. Ha pulverizado sus propias marcas. El Españoleto agranda su leyenda en Europa. El lienzo 'Prometeo' del pintor setabense se vendió ayer por 3,84 millones de libras (4,45 millones de euros) en una subasta de Sotheby's celebrada en Londres.

El óleo se convirtió en la obra más cara de Ribera al triturar su anterior marca, que ostentaba 'El martirio de San Bartolomé' por el que se pagaron 2,75 millones de libras (3,19 millones de euros) en julio de 1990.

«Ocho interesados en la sala y por teléfono pujaron animadamente, fulminando la estimación anterior a la venta de 800.000 a 1.200.000 libras (900.000-1.350.000 euros)», según los responsables de la casa de subastas.

El cuadro de Ribera, de gran tamaño (193,5 por 155,5 centímetros), aborda un tema mitológico y es una representación de Prometeo, el titán que se atrajo las iras de Júpiter al robar el fuego para dárselo a los hombres.

El óleo pertenecía a Barbara Piasecka Johnson, viuda de J. Seward Johnson, uno de los fundadores de la firma de productos médicos y farmacéuticos Johnson and Johnson, que vendió ayer parte de su rica colección de arte del Renacimiento y el Barroco.

'Prometeo' constituye «una de las obras más dramáticas y violentas» del pintor valenciano en cuanto a la composición.

De la serie de titanes de Ribera, se se conservan tres originales: el que ayer se subastó y otros dos que están en el Museo del Prado.

Hoy, Sorolla

Thomas Hiepes triunfó el martes, el Españoleto pulverizó cifras ayer y hoy el turno es para el maestro de la luz. «El dibujo en Sorolla es muy importante, porque es un artista que valoraba mucho la pequeña idea». Juan Várez, consejero delegado de Christie's Ibérica, destacaba con esta frase el valor de los bocetos que hoy saldrán a subasta en Londres. La estimación de cada uno de los dibujos varía. Así, algunos tienen un precio de salida de 1.700 euros y otros alcanzan los 17.000 euros. Son precios «asequibles», según la casa de subasta, que sostiene que pieza en papel «no es una obra menor». Hoy el mazo de la subasta tendrá la última palabra.