Los funcionarios de Torrent deberán fichar con su huella dactilar

El Ayuntamiento de Torrent creará un sistema innovador para controlar el acceso de los funcionarios. Será a través de la implantación de la huella biométrica cómo el Consistorio torrentino vigilará si sus empleados públicos cumplen con su horario laboral.

Este sistema consiste en un elemento sensor que extrae varios puntos de la huella dactilar de la persona.

De esta forma, el Ayuntamiento tendrá constancia de la hora exacta en que los funcionarios acceden a su puesto de trabajo, así como el momento en que se marchan. Esta medida entrará en vigor a finales de año. Actualmente, ya se han empezado a recoger las huellas digitales. Este procedimiento de control surge a raíz de la polémica acontecida hace varios meses entre los empleados públicos y la Corporación municipal.

En ese momento, la alcaldesa, María José Català, acusó a los funcionarios de no cumplir con su jornada laboral. Por ello, les anunció por correo interno que el ausentismo laboral conllevaría una reducción salarial. Esta denuncia iba dirigida al tiempo en que los empleados públicos se ausentaban para almorzar.

Desde el Consistorio se acusaba de sobrepasar los 30 minutos que fija el Estatuto Básico del Empleado Público en su artículo 54. Esta notificación no sentó nada bien a los funcionarios, que se sintieron cuestionados.

El ejemplo de Chiva

Este mecanismo se aplica en el Ayuntamiento de Chiva desde junio del año pasado. En el caso del control de la huella dactilar, la precisión es exacta ya que cada registro sólo se corresponde con un usuario.

Por eso, las triquiñuelas no tienen cabida con la biometría. El funcionamiento es sencillo. Cada trabajador tocará un lector instalado en la puerta de acceso al edificio, que registrará la hora y minuto exactos en los que cada empleado inicia su jornada laboral.

De esta forma los funcionarios de Torrent sentirán cómo su huella dactilar se convierte en el mejor tic-tac laboral.