París hotel & resort

Una de las últimas modas de los norteamericanos para incrementar los datos de natalidad es el paquete turístico denominado “paquete cigüeña”. La oferta consiste en un fin de semana de ensueño para parejas que buscan un embarazo que no llega por culpa, entre otras cosas, del estrés cotidiano.

Con la estancia en un hotel que dispone de sala de masajes, spa, productos afrodisiacos y un entorno relajante, los promotores de la idea dicen que es posible ver cómo aumentan las cifras demográficas.

Aparentemente no es más que una oferta de relax hotelero presentada de forma fina y hasta un poco zen, pero hay algo que diferencia esta iniciativa de cualquier otra propia en un sector que debe pensar en todos sus públicos. Se trata de la existencia de un equipo de asesores y médicos especializados a quienes se puede consultar en el hotel.

En ese punto difiere notablemente de propuestas que ya se hacen en nuestro país para matrimonios con hijos que han olvidado lo que es tener un fin de semana tranquilo y que quieren revivir una especie de luna de miel antes de que los niños vayan a la Universidad. Para ellos, hay cadenas hoteleras que preparan jornadas especiales con programación maratoniana para los hijos a quienes recogen por la mañana y dejan a última hora de la tarde, de forma que el matrimonio puede olvidarse de ellos durante todo el día y recordar su doble condición, es decir, que, además de progenitores, son pareja.

En el caso del “paquete cigüeña” el enfoque es distinto, prueba de ello es la presencia de profesionales que ayudan a crear la atmósfera adecuada para la reproducción entre un acelerado mundo laboral, competitivo y exigente.

La idea, por tanto, no es mala aunque es inevitable mirar hacia esos hoteles como si de la auténtica París se tratara y como si de verdad al pasar por la puerta, desde la carretera, pudiera decírsele al hijo: “Mira, los niños vienen de París... París hotel & resort”.