Una mujer, en coma tras electrocutarse en la ducha por deficiencias en su finca de Alboraya

Electricidad en la conducción del agua. Esta extraña anomalía ha dejado a una vecina de Alboraya en coma y a más de un centenar de sus vecinos sin suministro de agua mientras técnicos municipales tratan de subsanar el problema.

El accidente doméstico se produjo el domingo por la noche, cuando la víctima, Mari Paz C. Z., de 39 años, se duchaba en su casa de la calle Doctor Angélico. Su marido la auxilió y sufrió quemaduras leves, según fuentes policiales. Una ambulancia la evacuó al Hospital Virgen del Consuelo, donde permanece ingresada en estado de coma.

LAS PROVINCIAS contactó con sus familiares en el centro sanitario, pero declinaron ofrecer explicaciones sobre lo ocurrido. En principio, se pensó que se trataba de un accidente doméstico común relacionado con el uso de algún aparato eléctrico en la ducha, pero al parecer no fue así. La electricidad provenía del agua.

De hecho, otros residentes del bloque de edificios, que agrupa cinco patios y 115 viviendas, ya habían notado descargas, pero no dieron la voz de alarma hasta que Mari Paz sufrió la descarga. “No hubo ninguna reclamación ni queja hasta que ocurrió lo del domingo”, destacaron fuentes municipales. A partir de entonces se activaron todas las alarmas y se decretó el corte del agua por precaución.

Un problema interno

Iberdrola no detectó deficiencias en su red “que termina en los contadores” de los edificios. El problema, por tanto, estaba en el bloque de viviendas, de unos 44 años de antigüedad y situado en una de las zonas más humildes del municipio.

Las primeras mediciones de tensión en el agua dieron resultado positivo. “Realizamos varias pruebas. Se comprobó que había electricidad en el agua cuando los electrodomésticos de todas las viviendas estaban enchufados”.

Paralelamente, el Ayuntamiento comprobó que el bloque tiene “importantes deficiencias en los contadores y en toda la red eléctrica, como la falta de diferenciales o de tomas de tierra”, mecanismos que posiblemente podrían haber evitado las descargas. Por ese motivo los técnicos han comenzado a instalar tomas de tierra en cada uno de los cinco patios para intentar paliar el problema. Es posible que, tras esta medida de seguridad, el Ayuntamiento devuelva hoy o mañana el suministro de agua a los vecinos, que deberán encargarse de colocar los diferenciales.

En cuanto al origen concreto de la fuga eléctrica, los técnicos detectaron ayer que tres casas generan más tensión de la debida. En una de ellas el problema radica en una lavadora, en la segunda, en un calentador, y en la tercera, en varios electrodomésticos. “Es posible que haya que precintar esta vivienda porque es peligroso vivir ahí dentro, por lo menos hasta que se solucione la avería, añadieron las mismas fuentes del Ayuntamiento de Alboraya. En tal caso habría que desalojar a los moradores.

Cambiar toda la instalación

El Consistorio no cree que la colocación de tomas de tierra sea una solución definitiva al problema en los edificios de la calle Doctor Angélico. “Será necesario cambiar toda la instalación”, añadieron desde el Ayuntamiento, que prevé trasladar el problema a la Conselleria de Industria. “El Consistorio tutelará todas las reparaciones, pero deberá actuar la Conselleria”, recalcaron las mismas fuentes.

Los vecinos de los edificios afectados, un total de 115 familias, intentan hacer vida normal con el tremendo inconveniente de no disponer de agua potable. La inquietud y la intranquilidad se palpaba ayer entre los residentes, también afectados por el desgraciado accidente. “La descarga que ella recibió la podríamos haber sufrido cualquiera”, destacó Inmaculada, una vecina.

Para subsanar la carencia de suministro, muchos se abastecen de una fuente de agua potable que hay en la zona. Para aseo y cisternas de los inodoros, se les está facilitando agua por medio de un camión de Protección Civil. Algunos afectados optaron por trasladar la ropa sucia a sus familiares y amigos para lavarla.

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