H. E.
Miércoles, 6 de junio 2018
valencia. Mestalla enfila el camino para ser un estadio de fútbol sin humos. La idea que desde hace meses se barruntaba en los despachos del Valencia toma forma y es factible que la temporada que viene en la grada del estadio más antiguo de Primera División -siempre que el Sporting de Gijón no ascienda- no haya ni rastro de tabaco. La decisión la adelantó el programa 'Noranta minuts' de CV Ràdio y desde el club confirmaron ayer que se trabaja para que sea una realidad en el tiempo más breve posible.
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El Valencia madura la manera de abordar una decisión que implica un amplio plan de concienciación dirigido a aquellos aficionados fumadores y que hasta el momento no se han visto afectados por unas medidas que se aplican en otros recintos deportivos españoles. La idea es habilitar algunas zonas en las que se pueda fumar, como en algún pasillo o en los balcones de la fachada principal, pero lo que tiene claro el Valencia es que Mestalla tiene que ser en el menor tiempo posible un estadio sin humos. Por todo ello, el club pedirá la colaboración tanto de los aficionados fumadores como de aquellos que no lo son con el fin de que la transición se haga con la mayor normalidad posible. En el Valencia consideran que hay que dar ejemplo con conductas que inciten a la vida sana además de ser ejemplo para los miles de niños que acuden cada partido a Mestalla a animar a su equipo.
Algunos gobiernos autonómicos han puesto en marcha leyes para que en los recintos deportivos existan conductas saludables. El Parlamento vasco aprobó en abril de 2016 una norma que prohibía fumar y vender bebidas alcohólicas en los estadios. Además, tampoco se pueden consumir los denominados cigarrillos electrónicos. La ley salió adelante con el voto a favor de todos los grupos parlamentarios excepto UPyD, que optó por la abstención.
La medida, que cuesta de implantar entre los aficionados, necesita de campañas de concienciación. El Athletic Club, un año después de que entrara en vigor la ley, todavía tenía que lanzar potentes campañas entre sus aficionados para que recordaran la prohibición de fumar en San Mamés. De hecho, muchos seguidores se resguardaban en los cuartos de baño para tratar de matar las ansias con alguna calada furtiva a un cigarrillo. El Athletic puso en marcha la campaña 'Tu salud en juego' con el asesoramiento de la Asociación Contra el Cáncer de Bizkaia.
En el estadio bilbaíno la inmensa mayoría de los aficionados cumplen con la normativa, aunque de vez en cuando alguno se la salta y se expone a una sanción recogida en la ley aprobada por el Parlamento vasco. De la misma manera que no se puede fumar en San Mamés tampoco se puede hacer en Anoeta, campo de la Real Sociedad, ni en Mendizorroza, donde juega el Deportivo Alavés.
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En la liga española hay otros estadios en los que está prohibido fumar. Uno de ellos es el de La Rosaleda de Málaga, que desde la temporada 2016/17 y por deseo expreso del jeque Al-Thani prohibió que se pudiera fumar. El Camp Nou también es desde 2016 un estadio alejado totalmente del tabaco. Una medida que en su día fue aprobada por la inmensa mayoría de la asamblea de compromisarios.
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