Carlos Pastor presenta en Valencia 'Bestezuelas', una historia de amor atrapada en la violencia

El director Carlos Pastor ha presentado hoy en Valencia su última película, "Bestezuelas", una historia de amor atrapada en un mundo de violencia y machismo derivado del dinero de las apuestas de un canódromo, donde los personajes también libran una carrera por sobrevivir.

Así la ha descrito el realizador en una rueda de prensa ofrecida junto a algunos de los actores que participan en este film protagonizado por Gustavo Salmerón, Marian Álvarez y Roger Casamajor, que fue premiado por el público en la Mostra de Valencia de 2010 y que será estrenada en las salas comerciales el próximo día 20.

La historia se centra en uno de los pocos recintos para carreras de galgos que hay en España, en el que las apuestas, los negocios ilegales y las armas caracterizan la marginalidad de los personajes que lo regentan.

En este contexto, surge un conflicto amoroso entre un expresidiario (Gustavo Salmerón) y el camarero del canódromo (Roger Casamajor), capaces de cualquier acto violento por conseguir a la mujer que ambos pretenden, "Perla" (Marian Álvarez).

Un dinero robado abre las puertas de una nueva vida para los personajes de este sórdido escenario, y todos corren y pelean por conseguirlo.

Esta es la "metáfora" que suscita la película: "Los galgos corren persiguiendo un conejo, y los personajes lo hacen detrás del amor y el dinero", ha comentado el director valenciano.

El proyecto comenzó a gestarse hace cinco años, pero la crisis económica dificultó su financiación y retrasó su rodaje hasta 2010 en unas condiciones de austeridad que, según Pastor, incluso ha "favorecido" el trabajo final.

"Cuando hay poco presupuesto las mayores víctimas son los actores, porque no hay tiempo para los ensayos. Rodamos viendo cómo los actores construían sus personajes pero esto ha sido favorable, porque su trabajo ha sido tan bueno que te los crees a todos, es casi una interpretación de teatro", ha relatado.

Es una "película dura, hecha cono poco dinero y que funciona, fundamentalmente, por sus actores y un guión redondo", que también está firmado por el realizador.

El montaje, obra de Mapa Pastor -que recibió un Goya en 2010 por su trabajo en "Celda 211"- y el empleo de la música como elemento narrativo contribuyen a dar forma a un film "coherente con el mundo que refleja".

"Una obra de cine independiente con alma y a la altura de las grandes producciones", ha asegurado el músico "Caldito", compositor de parte de banda sonora de un largometraje que ha sido seleccionada por diferentes festivales internacionales como el de El Cario o Bogotá.