Barberá y Terol se quedan solos

Cuando el domingo arranque en Catar el Mundial de MotoGP, sólo dos valencianos tendrán el privilegio de acelerar en el asfalto de Losail. Héctor Barberá y Nico Terol son los únicos pilotos que han superado la criba generada por la crisis y siguen por lo tanto en la elite del motociclismo. La falta de patrocinadores cerró el paso hace unos años a muchos valencianos que ahora compiten fuera del Mundial de MotoGP o bien tomaron la obligada opción de la retirada.

Ya en la pasada temporada, Terol y Barberá fueron los únicos nacidos en la Comunitat que iniciaron el campeonato, aunque Sergio Gadea llegó a correr la carrera inaugural de Catar. El alcoyano afrontaba una temporada de transición en Moto2 tras proclamarse campeón de 125 c. c., mientras que el de Dos Aguas quedaba undécimo con la Ducati en la categoría reina. No fue una buena temporada para ninguno, y la 'senyera' sólo subió una vez al podio del Mundial. Lo consiguió Terol en la última carrera, el Gran Premio de casa, el de Cheste.

En la 2012 hubo hasta ocho valencianos en liza. Los 'consagrados' más aquellos que buscaron en el extranjero una montura imposible de conseguir en la Comunitat. A Barberá y Terol se unieron Elena Rosell y Ángel Rodríguez. Rosell había debutado con el Aspar Team una temporada antes en Assen, nada más y nada menos. La piloto de Manises sustituyó en esa carrera al lesionado Julián Simón. Para la nueva temporada llegó a un acuerdo con la Federación Catarí y corrió diez pruebas. El talentoso Ángel Rodríguez también consiguió una moto después de su travesía por el desierto, pero sólo aguantó tres carreras. Héctor Faubel y Adrián Martín corrían en Moto3, categoría para la que Julián Miralles junior y Jorge Navarro recibieron una 'wild card' que les sirvió para estar en un Gran Premio.

Una de las claves para entender el descenso del número de pilotos valencianos en el Mundial fue la falta de financiación de la Cuna de Campeones, que desde la pasada temporada ha recuperado mucho del terreno perdido durante los años más duros de la crisis. La verdadera escuela de muchos de los pilotos de la Comunitat que han llegado al Mundial perdió su equipo en el Campeonato de España de Velocidad (CEV) en 2009. A finales del campeonato de 2008, muchos padres ya no podían llevar a sus hijos a las carreras al no poder asumir los gastos. El siguiente paso fue demoledor, porque el paso lógico de los pilotos era pasar por el CEV para curtirse y exponer sus credenciales de cara a un futuro salto al Mundial. La falta de patrocinio local hizo el resto.

Jorge Martínez 'Aspar' explicaba hace unos días que las dificultades económicas habían provocado que buscara financiación en el exterior para el nuevo curso: «El ochenta por ciento de nuestros ingresos proviene del extranjero. Malasia, Japón, Estados Unidos o Inglaterra», decía. El Aspar Team, único equipo valenciano en el Mundial, correrá este año con dos extranjeros: Hayden y Aoyama.

Lejos queda el prolífico 2010 para los pilotos de la Comunitat. Entonces estuvieron Barberá, Álex Debón, Gadea, Faubel, Xavi Forés, Bernat Martínez (ahora en el campeonato americano AMA de Superbikes), Terol y Adrián Martín. Un año antes hubo cinco valencianos. Y ahora sólo quedan dos. Barberá, obligado a dejar atrás sus problemas extradeportivos para cumplir en MotoGP, y Terol, al asalto del Mundial de Moto2.