El PP lanza un plan 'antiPodemos' para recuperar apoyos de cara a las municipales

El PP se apunta al mensaje de Podemos, por lo menos en cuanto a lanzar ideas de regeneración democrática e ilusión más allá de la «racionalidad» de los datos económicos. Se trata de llevar «emociones» a los ciudadanos a través de la presencia activa de cargos en la calle. El primero será el propio José Císcar, que se descargara de su función como portavoz en el Consell para centrarse en las próximas elecciones, que empiezan ya para el partido.

El comité electoral se unió ayer a la Junta Directiva del PP provincial, primero para reconocer errores en la estrategia de campaña de las europeas, que les ha pillado por sorpresa.

Así, sin paños calientes, el secretario general de la formación, José Juan Zaplana, admitió que el resultado «no era el que esperábamos». Los populares alicantinos han perdido más de 150.000 votos en estas europeas con respecto a las del año 2009.

Por ello, conscientes de que en un año tienen que remontar si no quieren perder los principales ayuntamientos de la provincia y la propia Generalitat, han comenzado ya la campaña electoral.

Tienen dos frentes: un argumentario antiPodemos, que rebata las propuestas de la nueva fuerza política, y la continua presencia en la calle de cargos y candidatos. «En estas elecciones no se votaba a nadie con una conocida», que es la quiere mostrar ahora el PP, aunque admiten que es «muy complicado».

Pero por esfuerzo no será. Para combatir la imagen actual del partido han pedido ayuda a Nuevas Generaciones, en busca del ahora fundamental apoyo juvenil, con un plan específico hacia este nicho electoral.

Todo este esfuerzo es la primera parte. El partido ha convocado una Convención Provincial para finales de septiembre, que será la larga salida a la campaña electoral de mayo de 2015.

Actos, más actos y más actos, porque creen que el PP también puede.