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RAMÓN BERNABEU
Martes, 17 de junio 2014, 00:56
Una fuerte granizada sembró ayer tarde el pánico entre los agricultores del Alto Vinalopó. La tromba de agua y pedrisco se localizó en los límites de la provincia de Alicante, Albacete y Valencia y provocó también el retraso de un convoy del AVE que tuvo que permanecer parado unos minutos en la estación de Villena a la espera de que amainara el temporal.
El granizo afectó fundamentalmente a cultivos de frutales como la cereza, que se encuentra en plena campaña de recolección. A otros como el cereal no les ha hecho mella porque la escasa cosecha que ha escapado a los efectos de la sequía ya está recogida, según fuentes de la organización agraria Asaja.
En la Font de la Figuera se recogieron 57 litros por metro cuadrado. La tormenta se desarrolló entre las 15.00 y las 17.00 horas, con abundante aparato eléctrico, aunque la mayor parte de las lluvias se recogieron en apenas una hora, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Las temperaturas máximas también descendieron ligeramente en la provincia de Alicante. Las más significativas fueron los 29 grados de Xàbia, los 28 de Pinoso y los 27 de la ciudad de Alicante.
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