Debacle del Orihuela en el Villamarín

El Betis B marcó todos sus goles en la segunda parte y culminó la remontada y el ascenso en el último minuto de la final tras perder 2-0 en Los Arcos

R. A.

Domingo, 22 de junio 2014, 09:05

El Orihuela cayó con estrépito en el último choque que tenía para ascender a Segunda B y lo hizo de la manera más dolorosa que se puede pensar, en el minuto final de un encuentro contra el Betis B en tierras sevillanas que lo dejará en Tercera División un año más.

Publicidad

Cuatro goles en la segunda mitad le valieron al filial verdiblanco para derrotar a un equipo que no había encajado ni un solo gol en toda la promoción de ascenso, y que supieron como la hiel a los trescientos seguidores que recorrieron en autobús 600 kilómetros para apoyar a su equipo en el último trance para abandonar el infierno en el que ha vivido el último año.

El empuje y el coraje del Betis B le sirvieron para dar la vuelta a un marcador que el Orihuela encaró bien en la primera mitad, al adelantarse el equipo de Paco Onrubia a los sevillanos con un gol de Vivanco a pase del delantero Antonio, que ponía franca la eliminatoria desde el minuto 25.

El Orihuela aguantó concentrado la primera mitad a un filial bético que salió pronto en busca de un gol tempranero y con buenas jugadas y triangulaciones por parte de sus centrocampistas. La imagen de los de la Vega Baja era buena, con un asedio constante de los hispalenses y un Nacho Poveda muy activo desde el principio, pero el Betis no se amilanó y buscó los saques de esquina y faltas al borde del área para acortar distancias. Un juego muy vertical desde los primeros compases pero estéril y el Orihuela veía correr el reloj, consciente de que el gol obligaba al contrario a meter cuatro tras el de Vivanco.

Pero el conjunto andaluz no se descompuso y siguió trenzando sus jugadas en busca de acortar distancias, apoyado en una hinchada que llenó a miles el Benito Villamarín. El Orihuela tuvo sus oportunidades de sellar el partido en alguna que otra ocasión aislada pero pronto los sevillanos dieron el primer aviso con un remate al larguero y con un Kevin de carrilero penetrando con peligro.Las faltas se sucedían en el área de Emilio pero la defensa visitante disipaba los centros con solvencia y en busca del descanso, al que se llegó con ventaja del Orihuela.

Publicidad

Pero tras la pausa el Betis salió con un impetu que pasó por encima de los amarillos, pese a que el preparador manchego del Orihuela ajustó la línea medular para buscar mayor consistencia y tener superioridad de juego en el medio campo. El Betis seguía a lo suyo y en el minuto 55, Emilio ya tuvo que realizar una gran parada para atajar un balon envenenado y Óscar Cano, el técnico beticista, sacó a Isuardi para buscar los goles de la machada. Tardó poco el jugador local en empatar el choque con un gol de falta directa y acto seguido fue Álvaro González el autor del segundo, que acortaba distancias para el Betis B.

Apartir de ese momento, con un Orihuela falto de ideas y desfondado, las oleadas béticas se fueron sucediendo y llegó el tercero de Juanma en un discutido gol en posible fuera de juego. Quedaban diez minutos y el Orihuela estaba grogui por los embites locales, con más faltas peligrosas asediando la meta de Emilio ya que el 31 le valíaa los visitantes. Al final, la puntilla la puso Caro pasado el minuto noventa, para los béticos y el público estalló en alegría invadiendo el campo, con un Orihuela deshecho por después de haber vivido una hecatombe impensable en la segunda mitad.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€

Publicidad