El conductor, estable y en la UCI, ha sido trasladado a Alzira

El conductor del camión que colisionó con la furgoneta en el accidente de Cox, en el que murieron ocho personas, permanece estable, aunque dentro de la gravedad, e ingresado en la UCI del Hospital de la Ribera, Alzira.

El parte médico ha sido facilitado tanto por el hospital valenciano como por el centro hospitalario comarcal de Orihuela, donde inicialmente fue remitido tras el accidente.

El suceso tuvo lugar alrededor de las 16,40 horas de ayer en la autovía A-7, a su paso por Cox, después de que el camión invadiera la vía contraria de circulación y colisionara con la furgoneta en la que viajaban los ahora ocho fallecidos.

La colisión fue "brutal", según han asegurado fuentes de la Guardia Civil, lo que provocó que ambos vehículos se salieran de la calzada y cayeran a un canal de desagüe de aguas pluviales, al tiempo que se originó un incendio.

Los primeros equipos de auxilio y rescate localizaron al conductor a unos veinte metros del lugar del accidente, si bien aún no se ha determinado si fue porque salió por su propio pie de la cabina de conducción para evitar abrasarse o salió despedido de la misma como consecuencia del impacto de la colisión, según apuntaron fuentes de la investigación.

El conductor del camión ha dado negativo en las pruebas de alcoholemia y consumo de drogas que se le han practicado, han informado a Efe fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, cuyos agentes ya le tomaron declaración en la tarde de ayer.

El reventón de un neumático del camión pudo ser la causa del accidente, según las hipótesis que barajan los investigadores.

Esta es una de las posibilidades que se barajan a falta de completar las pesquisas y entrevistarse con otros conductores que pasaron por el lugar y pudieron percatarse del suceso o ver el reventón, han añadido las mismas fuentes.