La UA avisa del riesgo de gota fría por la alta temperatura del mar

El riesgo o «factor de base» para una situación de lluvias torrenciales o gota fría en Alicante está «presente» debido a que la temperatura del mar Mediterráneo está «muy caliente», según explicó ayer el responsable del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante (UA), Jorge Olcina .

Olcina alertó de que el mar «está muy caliente ya desde finales de julio». De hecho, frente a la costa de la provincia de Alicante, la temperatura alcanza los 27 grados centígrados, mientras que el agua está a 26 grados en el sector marítimo entre Alicante, Valencia y las Islas Baleares, tal y como precisó el responsable del observatorio climatológico de la UA. «Ahora queda que se den las circunstancias atmosféricas propicias, es decir, que se instale aire frío en las capas altas atmosféricas para que se pueda desencadenar una buena situación de lluvias abundantes», explicó Olcina , quien señaló que «los pronósticos no dan este tipo de situación para las próximas dos semanas», de manera que «habrá que esperar a ver cómo evoluciona la situación meteorológica en septiembre y octubre».

La última gota fría con lluvias «importantes» en la provincia de Alicante fue la que se registró en 2007 en la Marina Alta, según ha recordado Olcina . «Cayeron en algunos puntos de esa comarca más de 400 litros por metro cuadrado en un par de días. Fue la que se llevó por delante el puente de Beniarbeig por la crecida del río Girona», ha recordado el director del Laboratorio de Climatología de la UA.

En la ciudad de Alicante, la última gran inundación tuvo lugar en septiembre de 1997, cuando se registraron 270 litros por metro cuadrado en 24 horas. Como consecuencia de estas fuertes precipitaciones fallecieron cuatro personas.

Sobre ese aspecto, Jorge Olcina ha recordado que, tras la gota fría de 1997, se acometieron en Alicante las obras antirriadas, por lo que, «en teoría la ciudad está preparada para soportar lluvias de esa cuantía en 24 horas». «Otra cuestión es que se registraran lluvias incluso superiores y entonces habría que comprobar la efectividad de esas obras», ha recalcado Olcina , quien ha sostenido que «sin duda, en algunos puntos de la ciudad habría problemas de anegamientos de agua».

Jorge Olcina afirmó que ante una situación de gota fría «el problema es que los cultivos no pueden absorber tanta lluvia y pueden aparecer problemas de plagas por exceso de humedad, por ejemplo en los cítricos o en la uva de mesa». Además, Olcina afirmó que «las lluvias torrenciales suelen causar destrozos en los campos y erosión en los bancales debido a que circula el agua con mucha fuerza sobre ellos y se lleva lo que se encuentra por delante».

Sin embargo, el climatólogo subrayó que «dadas las condiciones de sequía tan fuertes actuales, cualquier lluvia será muy bien recibida por los agricultores».

El presidente de Asaja Jóvenes Agricultores de Alicante, Eladio Aniorte, aseveró que «no sabemos qué es peor», en referencia a la posibilidad de que se produzca el fenómeno de la gota fría y al panorama «desolador» del campo a causa de la ausencia de precipitaciones.