La rebelión contra el calor vacía centros y se suspenden clases pese al riesgo de sanción

Las aulas de la provincia están revolucionadas y según pasan los días y las temperaturas no refrescan, la situación empeora. Tras una semana del inicio del curso escolar, en la jornada de ayer subió la tensión en la comunidad educativa y hubo alumnos que se plantaron y no entraron a clase, más padres decidieron llevarse a sus hijos a casa ante la imposibilidad de seguir impartiendo la materia en el patio y un instituto de Alicante aprobó la suspensión de las clases hasta el próximo lunes.

Esta medida se adoptó en el IES Virgen del Remedio previa «puesta en conocimiento de las autoridades educativas competentes». Desde el centro entregaron ayer a los estudiantes una hoja donde se informaba a las familias de los problemas que están teniendo para impartir clases por el calor sofocante y la previsión del tiempo para hoy y mañana, por lo que hasta el lunes no se retomará la actividad lectiva.

Según fuentes consultadas, los profesores tendrán que ir al centro, tal y como les comunicó la inspección, pero a última hora de la mañana de ayer recibieron el aviso de la dirección territorial de Educación de Alicante que pedía a la directora que diera marcha atrás a la medida o se abriría un expediente disciplinario.

Como se recordará, la consellera del ramo, María José Catalá, dejó en manos de los equipos directivos la posibilidad de suspender las clases si no se pueden impartir en condiciones de normalidad y «motivan las circunstancias». Así lo dijo el pasado viernes y posteriormente el director territorial de Educación se manifestó en los mismos términos ante la Junta de Personal Docente no Universitario, que ayer seguía a la espera de una contestación sobre la resolución adoptada y registrada para la suspensión de la actividad lectiva en la provincia.

El secretario general de Enseñanza de CC OO en L'Alacantí-Les Marines, Paco García, criticó este cambio de actitud con respecto al Virgen del Remedio, con «amenazas de abrir expedientes disciplinarios» cuando los centros están tomando medidas de responsabilidad hacia los alumnos.

Mientras la Permanente de Directores de Secundaria de la provincia se reunía ayer para analizar la situación del comienzo del curso, otros centros no sabían qué actuación tomar porque desde la inspección se había negado que tuviesen competencia para paralizar las clases.

Así ocurrió en el IES Doctor Balmis de Alicante, donde los alumnos de Bachillerato se plantaron e hicieron una protesta al grito de «¡que vengan los bomberos!» y también acordaron que hasta el próximo lunes no regresarán. «Para estar en el patio sin hacer nada no vamos», señaló Estefanía, una de las alumnas, quien dejó claro que es imposible estar en esas condiciones, por lo que piden soluciones. «No vamos a dejar que nos manipulen, el director nos ha dicho que debemos exigir que nos den clase, pero por el calor que hace nos tenemos que ir al patio y así no se puede», aseguró Estefanía, quien añadió que hoy y mañana faltarán las seis clases de Bachillerato, incluidos los de 2º de ESO que son los más perjudicados por la selectividad. Cuentan con el apoyo de los padres.

En el IES de San Blas, la mañana también fue convulsa. Desde la once de la mañana, la dirección decidió que los profesores que no pudieran seguir dando clases por las temperaturas de más de 27 grados saliesen al patio en busca de sombra. Esta situación llevó a alumnos, cansados del calor, avisar a las familias y, según explicaron a este periódico, fueron muchos los que acudieron al centro y se los llevaron.

Las altas temperaturas también trajeron de cabeza a los padres del colegio Clara Campoamor de Elche. Muchos no llevaron a sus hijos a clase y otros siguieron la política del lunes y los dejaron durante las dos primeras horas de la jornada lectiva cuando el calor aún no aprieta. A las once los recogieron. Desde la Asociación de Padres y Madres de Alumnos señalaron que una minoría, sin posibilidad de hacerse cargo de sus hijos en estas fechas por trabajo de los progenitores o cualquier otra circunstancia, no tiene otra opción que llevarlos al colegio «donde los profesores buscan los espacios comunes para refugiar a los niños del calor, ya que en el patio no tenemos ni una sombra», se quejaba una madre. Por ello, el Ampa instó a la Conselleria de Educación a dar una solución urgente al centro, que el viernes recibió la visita de un técnico del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (Invassat) para realizar mediciones de las temperaturas en las clases.

Según anunció el portavoz de la Plataforma en Defensa de la Educación Pública en Elche, Pep Coll, el informe realizado por este personal se dio a conocer ayer «y viene a dar la razón a los padres y su denuncia, al confirmar que las aulas superan los 27 grados centígrados que marca la ley».

La comunidad educativa del Clara Campoamor confía en que el departamento autonómico instale el aire acondicionado en las aulas y no descarta iniciar acciones de protesta si no hay respuesta de la Conselleria de Educación

Otros centros de la provincia seguían en la tarde de ayer con reuniones y asambleas para decidir cómo actuar estos días.