El baloncesto alicantino está muy vivo

Ayer volvió el baloncesto a Alicante, fue en el día grande del Lucentum. El equipo alicantino se puso guapo para presentarse ante su afición en el Pedro Ferrándiz, que recibió a cerca de 800 seguidores. Los de Kuko Cruza eligieron a un rival potente para su puesta de largo, el Amics de Castelló, uno de los equipos más fuertes de la Adecco Plata, que se encargó de que la presentación de los alicantinos no fuese perfecta, ya que los visitantes consiguieron la victoria por 62-66, en el último ensayo antes de que empiece la competición. El otro punto negativo fue la baja de Adriasola, que con un golpe en el dedo no pudo jugar y está a la espera de hacerse las pruebas médicas pertinentes para saber si estará en el debut liguero del próximo domingo.

Por lo demás, mañana plácida en el CT, con un público al que se le notó que echaba de menos el baloncesto en la ciudad y con la Kali, un año más, poniendo la banda sonora al partido. Además, el club que dirige Toni Gallego aprovechó para presentar a su cantera. Todos los jugadores de la base saltaron al parqué en el descanso, ante la mirada de los espectadores.

En cuanto al partido, se vio a un conjunto alicantino que todavía está ajustando las piezas -el equipo se ha renovado casi por completo y solo continúan tres jugadores de los que estaban el año pasado-, por lo que es pronto para hacer valoraciones, ya que, a estas alguras de la temporada, el margen de mejora es enorme. Aún así, el equipo dio la cara ante un gran rival y pudo llevarse el partido hasta el último minuto, pero enfrente tuvo a un equipo mucho más rodado, más hecho y que no vino a Alicante a pasearse.

Desde el principio del partido, los de Kuko Cruza jugaron a rachas y fueron casi siempre a remolque en el marcador, pero sin dejar que los castellonenses se alejasen, gracias al juego interior de Samuel Domínguez, que fue el máximo anotador del partido con 15 puntos, y al acierto desde la línea de tres de José Luis González y Xavi Hernández, aunque éste último falló el triple que hubiera forzado la prógorra. Pero sería injusto acordarse del base solo por esa acción, ya que dirigió perfecamente a su equipo y, además, aportó 12 puntos.

A pesar del buen juego que llegó a desplegar el Lucentum por momentos, todavía queda un largo camino que recorrer para que alcance su verdadero potencial. Además, la plantilla no está cerrada, esta semana se incorporará un pivot, que, aunque el club todavía no ha dado el nombre del jugador, sí se ha confirmado que será el más alto del equipo.