«Si no fuera inocente, cómo aguantaría lo que estoy aguantando», proclama Castedo

La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, se siente fuerte a pesar de la doble imputación judicial que arrastra por cinco presuntos delitos, las protestas que afrontó en el último pleno municipal y las peticiones de dimisión que rodean su día a día desde que estallaron los casos PGOU y Rabasa. Y así lo hizo ver ayer al término de los actos del día de la Policía Nacional, donde, entre otros participantes e invitados, coincidió con miembros de la unidad que la ha investigado durante los últimos tiempos: «Si no fuera inocente, ¿ustedes se creen que estaría aguantando lo que yo estoy aguantando?».

Castedo, que abandonó el tono crispado de otras ocasiones, respondió relajada a todas las preguntas de los medios de comunicación, a cuyos representantes indicó que, sin entrar en cuestiones personales, el Cuerpo Nacional de Policía destaca por su profesionalidad y por ser una institución garante de los derechos fundamentales de todos. Además, hizo hincapié en que nadie percibiese dobles intenciones en su discurso en la tribuna presidencial, donde acompañó al resto de autoridades.

La regidora alicantina declaró que, lejos de tener ningún problema con Fabra, siente el pleno respaldo, «absolutamente», del presidente de la Generalitat y también de su partido. «Otra cosa son las interpretaciones de otros, que llevo aguantando cuatro años», expuso en alusión a la ausencia de Fabra en la inauguración oficial de ayer por la tarde del Race Village de la Volvo en el puerto de Alicante. «Son problemas de agenda. Sobre todo, lo más importante es lo del día 11», fecha en la que se espera la presencia de alguno de los miembros de la Casa Real.

La alcaldesa asumió que no está en su mano concurrir de nuevo como cabeza de lista por el PP a la alcaldía de la capital alicantina. «Repetir no depende de mí, sino de mi partido. Yo me someto a la disciplina de mi partido, como siempre he hecho», razonó la responsable política.

A la pregunta de si se ha planteado dimitir de su cargo, replicó que eso es algo personal en lo que no va a entrar, ya que solo realizaba estas declaraciones en su condición de alcaldesa de Alicante, según recalcó. Asimismo, insistió en la defensa a ultranza de la llegada de Ikea a Alicante y volvió a recordar que Elche está a la expectativa, por si pudiese albergar una inversión de tal calibre.

Castedo tuvo palabras duras hacia los participantes en las protestas que hubo el pasado martes a las puertas del Consistorio para exigir su renuncia: «Podemos, Compromís e IU intentan ganar de manera agresiva lo que no pudieron conseguir de manera democrática». Sobre los integrantes de esas concentraciones, dijo que «no hay que mezclar a los vecinos de Alicante con ninguno de esos personajes». Añadió que a la plaza del Ayuntamiento llegó un autobús desde Valencia, así como gente de San Vicente, El Campello y Mutxamel.