

Secciones
Servicios
Destacamos
Bernat Sirvent
Miércoles, 5 de noviembre 2014, 01:24
Mucho antes de la una y cuarto del mediodía de ayer, ya corría como la pólvora entre bastidores del Auditorio Provincial, sede del Congreso Nacional de la Empresa Nacional, la posibilidad de que la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, doblemente imputada por las piezas judiciales separadas del Plan General y Rabasa derivadas del 'caso Brugal', se ausentara en la clausura protagonizada por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Y así fue. Oficialmente, fuentes próximas a la primera autoridad municipal, que ya anteayer tuvo un papel muy poco destacado en la apertura del Congreso, aunque forzó y logró la foto con el Rey, aseguraron a este diario que se hallaba «indispuesta». Es decir, «enferma».
Se hacía la hora del cierre del congreso que ha reunido a un ramillete muy granado de empresarios de toda España en el ADDA y la alcaldesa no llegó siquiera por un escorado lateral del monumental edificio, como ocurrió hace dos días. Para entonces, ya esperaban el jefe del Gobierno, Alberto Fabra; la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor; y el presidente de Les Corts, Alejandro Font de Mora.
Los asesores más próximos a Sonia Castedo también estaban ya presentes en el hall del Auditorio. Cuando llegó un coche oficial hasta la misma puerta del recinto, un vehículo de gama media y color crema, no bajó del mismo la alcaldesa. Fue el vicealcalde, Andrés Llorens, también imputado por el denominado 'caso Magallanes', quien hizo acto de presencia.
Llorens se unió a la comitiva de recepción que ya se iba formando con Font de Mora, el vicepresidente del Consell, José Císcar, y la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, a la que un día antes también le tocó en suerte ejercer parcialmente de 'maestra de ceremonias' ante la ya amortizada alcaldesa de Alicante, que asumió el pasado viernes en el Pleno del Ayuntamiento de Alicante que no será candidata si sigue imputada, algo que ratificó anteayer mismo la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal.
Las especulaciones sobre la ausencia de Castedo en el acto de ayer fueron muchas, aparte de la versión oficial de la indisposición. Una de ellas era que fue la propia alcaldesa la que evitó hacerse la foto con Rajoy y envió en su lugar al vicealcalde Nino Llorens. Otra, que también cobró fuerza durante todo el acto en el ADDA entre diversos dirigentes del PP consultados por este diario, es que se impuso la ausencia a Castedo desde el propio partido, bien por la dirección regional o incluso por la nacional. Se evitaba así una segunda foto que en su día Alberto Fabra calificó de «incómoda» y que no se pudo impedir con la llegada del Rey Felipe VI, ya que la alcaldesa ejerció de primera autoridad municipal y asumió su papel desde el punto de vista institucional.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.