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Luis Candela
Jueves, 6 de noviembre 2014, 01:38
Las peleas comenzaron al poco de iniciar el matrimonio, que se prolongó durante ocho duros años. La Audiencia Provincial de Alicante sentó ayer en el banquillo al hombre acusado de someter a su esposa durante todo ese tiempo a humillaciones, vejaciones e, incluso, a la que forzaba para mantener relaciones sexuales en el domicilio familiar que compartían, junto con la hija fruto de su relación, en Alcoy.
El Ministerio Público reclama para el procesado una condena de más de 12 años de prisión por dos presuntos delitos de agresión sexual, otro de violencia física y un delito de violencia psíquica, petición que ratificó ayer al término del juicio celebrado en la Sección Primera de la sede provincial. Por su parte, el hombre rehusó las acusaciones que pesan sobre él de las que dijo no ser ciertas.
Sin embargo, la mujer ratificó cada uno de los padecimientos a los que se vio sometida durante los años que duró la relación de pareja hasta que finalmente pudo escapar. La víctima denunció los empujones e insultos que le dedicaba casi a diario el hombre, tales como que era «una puta» o los reiterados «no vales para nada» que debía escuchar de boca de su marido hasta que el 26 de enero de 2009 se produjo la discusión más fuerte.
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