Francisco Reyes Prieto
Domingo, 9 de noviembre 2014, 03:47
Se acaban de cumplir dos años desde que abrió sus puertas el Centro de Rehabilitación e Integración Social (Cris). El mismo tiempo cuya titularidad está a cargo de Adiem (Asociación para la Defensa e Integración del Enfermo Mental de la Vega Baja), que gestiona los diferentes servicios que desarrolla en este edificio propiedad del Ayuntamiento de Torrevieja y cuyos gastos son asumidos al cien por cien por la Conselleria de Bienestar, que aporta anualmente los 380.000 euros de su presupuesto.
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La creación de este servicio en la ciudad salinera ha supuesto un antes y un después en la atención a las personas que sufren las distintas vertientes de la enfermedad mental, los cuales han mejorado sensiblemente sus condiciones de tratamiento, además de que han encontrado todo un horizonte de posibilidades.
Desde sus inicios ya han pasado por el centro unos 130 usuarios que presentaban diferentes trastornos psicóticos, esquizofrenia, y diversos estados de ánimo afectados por bipolaridad o problemas de la personalidad. En la actualidad el centro ofrece tratamiento a un total de 76 usuarios que con atendidos por cuatro psicólogos, una trabajadora social, un terapeuta ocupacional, tres educadores, además de un auxiliar administrativo. A todos ellos también se suman un número de voluntarios en prácticas, los cuales están ya en la recta final de sus estudios como técnicos de integración social.
El centro lo es también de Promoción de la Autonomía Personal de la Dependencia, según explica el gerente de Adiem, Francisco Canales, que junto a la presidenta, Gertrudis Marcos y el vicepresidente, Eduardo Riesco, son las caras más visibles de este colectivo que actúa en toda la comarca, pero principalmente desarrolla su labor en los municipios de Orihuela, Almoradí y Torrevieja.
Una jornada habitual en el Cris de Torrevieja está marcada por la intensidad y por el trasiego de personas que se dan cita en el centro. La actividad se inicia a las diez de la mañana cuando los usuarios se incorporan a los distintos talleres que se imparten en el edificio de la avenida de las Cortes Valencianas. La variedad de las opciones que se ofrecen comprende talleres de psicoeducación, habilidades sociales, psicomotricidad, habilidades de la vida cotidiana, informática, escuela de familia, arteterapia, habilidades prelaborales y cognitivas, manualidades y jardinería. Se imparten hasta las trece horas. Por la tarde, a partir de las tres y hasta las seis, es cuando se alternan las tutorías individuales y también con presencia de familiares de los usuarios, ya que la promoción de la mayor autonomía personal, es una de las claves que desarrollan los profesionales de Adiem, y sobre todo es posible en su entorno. De hecho, según Francisco Canales, el cien por cien de los usuarios se integran a la perfección en la sociedad, con sus naturales dificultades.
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Actualmente Adiem quiere dar un paso que les llevará un poco más allá de la mera integración social como es su Programa de Integración Laboral. Una formación específica que pretende acercar a las personas con enfermedad mental, el cual comenzó a desarrollarse el pasado mes de mayo y que coincidiendo con el verano ha comenzado a aplicar también la fase de integración en distintas empresas. Se trata, como indica Canales, de un programa de empleo con apoyo que supone toda una novedad en la dedicación a los enfermos mentales en la Comunitat Valenciana.
Adiem afronta sus múltiples acciones en toda la comarca con un presupuesto anual que alcanza los 900.000 euros, gracias a sus propios recursos como las cuotas de los socios, venta de lotería de Navidad, rastrillos benéficos, donaciones y actividades culturales o deportivas con finalidad recaudatoria. También reciben subvenciones de diversas obras sociales de las cajas de ahorro y empresas colaboradoras. Pero sin duda uno de los pilares fundamentales para que la atención de Adiem pueda ser una realidad, son las ayudas públicas que recibe de los fondos de la Generalitat Valenciana, a través de sus consellerias de Bienestar Social, Sanidad, Empleo, Economía y Hacienda. También de la Diputación Provincial de Alicante, el Fondo Social Europeo y los ayuntamientos de Orihuela, Almoradí y Torrevieja.
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La asociación, en sus diecisiete años de existencia ha logrado disponer de diferentes dependencias que en Torrevieja, son, además del Cris, el Centro de Recursos Padre Jofré, situado en la calle La Paz, un lugar donde entre otras actividades se desarrollan los programas de empleo y donde los usuarios realizan sus prácticas. También gestionan una vivienda tutelada. En Orihuela, además de contar con la sede de la asociación, cuentan con dos viviendas tuteladas, mientras que en Almoradí atienden un servicio de atención psicosocial.
Desde el año 2003 Adiem ha prestado su apoyo a un millar de enfermos mentales de la comarca de la Vega Baja. Su gran mayoría, después de dejar el colectivo, han sido derivados a otros servicios externos y solamente reciben una atención como cualquier otro enfermo crónico. Algo que llena de satisfacción a todos los profesionales de Adiem.
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En la actualidad el colectivo de usuarios de Adiem en toda la comarca alcanza las 250 personas que son atendidas por un total de veintinueve profesionales. Particularmente en Torrevieja a los 76 usuarios del Cris, se añaden treinta que son atendidos a domicilio y otros 50 que forman parte del programa de ocio y tiempo libre. Además disponen de otras líneas de actuación como las de atención a familias con 25 personas, atención, rehabilitación y apoyo personal, con treinta usuarios.
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