La gestión económica de Castedo, a examen en el debate sobre sus últimos presupuestos

Todavía le quedan cinco meses a la actual legislatura municipal pero los grupos municipales han empezado ya a hacer balance de la misma, con la vista puesta en las próximas elecciones, que son las que más abiertas están desde hace muchos años.

El Pleno de aprobación definitiva de los presupuestos 2015, los últimos de Sonia Castedo al frente de la Alcaldía, fue ayer buen ejemplo de ello. Las cifras que se pusieron sobre la mesa, tanto por parte del equipo de gobierno como de la oposición, fueron más allá de las cuentas 2015 para examinar con lupa la gestión económica realizada por el PP en los últimos cuatro años. Y es que, si cada fin de legislatura es un punto y aparte, el de ésta es un punto y final en toda regla, dado que, aunque venza el PP, el equipo de Castedo no tiene posibilidades de perpetuarse tras las próximas elecciones.

Las cuentas, que ascienden a 240 millones de euros, salieron adelante, por cuarto año consecutivo, con los únicos votos a favor del PP, que no admitió ninguna de las alegaciones presentadas por 11 colectivos y particulares. Destaca que de los grupos de la oposición solo EU presentó reclamaciones en tiempo y forma. UPyD lo hizo tarde y el PSOE tuvo que bregar ayer con la vergüenza de que hasta el PP le afease haber sido el único que ni siquiera las ha presentado. «Por problemas técnicos», según defendió ayer el portavoz, Miguel Ull.

Los grupos de la oposición centraron sus intervenciones en tres de los principales caballos de batalla de los últimos cuatro años. Por un lado, criticaron duramente el peso de las grandes contratas en el presupuesto, que no se ha atenuado pese a la exigencia de reducción del 20% de todos los contratos. Y, en concreto, el que tienen las que están en manos del empresario Enrique Ortiz, imputado junto a la alcaldesa en las causas separadas de Brugal relativas al PGOU y a Rabasa, o al menos participadas por éste. Volvió a salir a colación que uno de cada cinco euros del presupuesto van para el empresario y sus socios.

Otra de las críticas lanzadas al equipo de gobierno es el incremento que ha experimentado la deuda, en virtud de los dos rescates a los que se ha sometido el Ayuntamiento esta legislatura, para pagar a proveedores. Una deuda que ronda los 180 millones de euros y que solo en 2015 obligará al Consistorio a pagar 30 millones de euros y 300.000 euros solo en intereses de demora, según denunciaron ayer los ediles de la oposición.

En tercer lugar, hicieron balance de los importantes recortes que han sufrido en cuatro años partidas como la de Acción Social, que se ha reducido un 23% (2,6 millones), la de Empleo, que se ha recortado a la mitad (1,4 millones menos), la de Vivienda, que también se queda al 50% (3,6 millones menos), o las inversiones, que pasan de más de 14 millones a siete.

Superávit de 2,5 millones

Por contra, el concejal de Hacienda, Juan Seva, defendió que el equipo de gobierno ha conseguido pasar de «datos negativos en 2012 a positivos en 2015» y que el Ministerio de Hacienda ha puesto de ejemplo al Ayuntamiento en prácticas como el tiempo de pago a proveedores, que «se ha reducido en 100 días en dos años».

Añadió que los presupuestos son «realistas» y que gracias a la buena gestión el año acabará con un superávit de 2,5 millones de euros, que se incorporarán al presupuesto 2015 con una modificación.

El edil resaltó que todos los contratos se han reducido un 20% e instó a la oposición a encontrar «un solo Ayuntamiento que no haya acudido al crédito».