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J. C. F.
Jueves, 18 de diciembre 2014, 02:41
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, anunciará formalmente la próxima semana que el Gobierno central perdonará a las comunidades autónomas los intereses de la deuda contraída con el Estado a través de los mecanismos de liquidez -FLA y plan de pago a proveedores- creados para evitar el colapso de algunas comunidades autónomas. La condonación de los intereses supondrá para la Comunitat un ahorro que el propio equipo del conseller Moragues cifró ayer -en alusión únicamente a los intereses generados por el plan de pago a proveedores- en más de 1.300 millones de euros.
La decisión del ministerio de Hacienda de optar por esta fórmula llega tras un amplio debate suscitado en el seno del Gobierno central respecto a las medidas a adoptar para mejorar la financiación de las comunidades autónomas. En algunos ámbitos se había planteado durante los últimos días la posibilidad de dar luz verde a una quita de la deuda -la de la Comunitat supera los 35.000 millones-. Finalmente, la opción escogida pasa por rebajar al tipo 0 los intereses de la deuda generada por el recurso de las comunidades a los mecanismos de liquidez aprobados por el Gobierno desde 2012: línea ICO Vencimientos, Fondo de Liquidez Autonómica y Plan de Pago a Proveedores. En el caso de la Comunitat, la suma de los préstamos del Ejecutivo central supera los 21.000 millones de euros.
¿Y qué supone perdonar los tipos de interés? Desde el pasado 30 de julio, el Ejecutivo central ya había ordenado situar en el 1% los tipos de interés a pagar por el FLA -el interés fijado para las ayudas de 2012 estaba en el 5,18%, las de 2013 en el 3,91% y las de 2014, hasta la fecha citada, en el 2,41%-. En el caso del plan de pago a proveedores, el Gobierno valenciano asegura haber obtenido recursos por valor de 7.435 millones, y que esa cifra supone unos intereses de 1.330 millones de euros.
Y la medida, ¿para cuánto tiempo es? Perdonar los intereses de los mecanismos de liquidez es una medida atractiva, pero cabía la posibilidad de que la 'jugada' pasara por limitar su impacto al ejercicio de 2015, en el que el PP se la juega con las citas electorales previstas en el calendario. No es así. La decisión del Gobierno pasa por reducir a tipo 0 los intereses de toda la deuda contraída hasta la fecha y también la que se genere a partir del próximo año. Y la intención pasa, según algunas fuentes, por mantener la medida, como mínimo, hasta la aprobación de un nuevo sistema de financiación autonómica.
La previsión sobre la que trabaja el Gobierno central pasa por sacar adelante estas medidas en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera que, previsiblemente, se celebrará el martes de la semana que viene. Y en el consejo de ministros previsto para el día 26, dar luz verde al decreto necesario para darle forma.
Con todo, esa reunión del CPFF de la semana que viene no será sencilla. La medida que impulsa el Gobierno favorece a todas las autonomías que se han visto obligadas a acudir a los recursos financieros del Estado -la Comunitat Valenciana es una de las que lo ha hecho de forma significativa, aunque Cataluña aún ha requerido mayor apoyo-. Pero obviamente, genera una cierta situación de discriminación para todas aquellas regiones que no se han visto obligadas a recurrir a los mecanismos de liquidez del Gobierno. Las fuentes consultadas por este periódico señalaron ayer que el impacto de esta medida es el que obliga a redimensionar los informes elaborados por la AIReF, la 'policía fiscal' de Hacienda, respecto a las previsiones de déficit para el próximo ejercicio.
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