Las partidas de ajedrez

El momento de la verdad ha llegado (o casi) para todos aquellos que dentro del PPCV aspiran a ser candidatos. Empezando por Alberto Fabra, que continúa su propia campaña dentro del partido y por toda la Comunitat para postularse como el elegido por Mariano Rajoy para tratar de conseguir que los populares sigan al frente de la Generalitat Valenciana. Las posibilidades de Fabra aumentan con el paso de los días por dos motivos: por la purga de imputados en las filas del grupo parlamentario del PPCV en Les Corts; por la salida de Sonia Castedo del Ayuntamiento de Alicante y por el autodescarte de varios de los nombres que sonaban como alternativa al jefe del Consell, como María José Català o Esteban González Pons. Alberto Fabra, como ya le ocurrió hace cuatro años a Francisco Camps, tendrá que esperar a que Rajoy y la cúpula de Génova decidan pronunciarse sobre quiénes serán los candidatos en las diferentes comunidades autónomas para las elecciones que se celebrarán en poco más de cuatro meses.

También los aspirantes a encabezar la candidatura del PPCV al Ayuntamiento de Alicante están en un sinvivir. La cena del pasado jueves en un restaurante alicantino escenificó esa especie de partida de ajedrez que se juega para ocupar el puesto dejado vacío por Castedo. Como se suele decir, muchos son los llamados y pocos los elegidos, pero todos tienen la esperanza de ganarse el apoyo de las juntas de distrito y la bendición del partido, de nuevo Génova, para liderar la lista. Los nombres siguen siendo los mismos: Asunción Sánchez Zaplana, Carlos Castillo y Carlos Mazón.

Otro tablero en el que también se juega una partida es en la Diputación. Luisa Pastor aspira a repetir de nuevo como presidenta de la institución provincial, suponiendo que los resultados que el PP obtenga a nivel municipal le permitan controlarla. La brillante gestión de Pastor, que ha puesto fin a la más que cuestionable labor de José Joaquín Ripoll, debería ser aval suficiente para que el partido respaldara su candidatura. Sin embargo, a la también alcaldesa de San Vicente le ha salido un duro competidor: José Císcar. El presidente del PP en la provincia de Alicante no se ve en Valencia, mucho menos en el caso de que su partido no pueda seguir al frente de la Generalitat, por lo que su futuro inmediato puede pasar por presidir la Diputación. Aunque Císcar dejó claro que «ahora no es el momento» de hablar de eso, si no el de ganar las elecciones municipales, es evidente que si el vicepresidente de la Generalitat entra en la lista del Ayuntamiento de Alicante dejará meridianamente claras sus intenciones.

Mientras tanto, Sonia Castedo sigue avanzando en su etapa postalcaldesa. Por si no tenía bastante con Facebook, Castedo ha descubierto Twitter, donde puede explayarse menos, y también pudimos verla anoche, cual estrella mediática, en un programa de Telecinco.