Las constructoras del aeropuerto de El Altet reclaman 34 millones a Aena

La construcción de la faraónica nueva terminal del aeropuerto internacional de El Altet, cuyo coste se disparó finalmente a 628,67 millones de euros (aproximadamente, 105.000 millones de las antiguas pesetas), podría tener un gasto añadido en breve y nada baladí: otros 34,1 millones de euros. Esta es la reclamación de cantidad que, por la vía civil, han planteado ante el Juzgado las dos constructoras que conformaron la UTE adjudicataria (Acciona y la alicantina fundada por Manuel Peláez Castillo, Ecisa). El motivo no es otro que una supuestos «perjuicios» sufridos por el aumento de los materiales de construcción durante la ejecución de los trabajos, que se prolongaron durante unos tres años.

En concreto, las dos compañías especializadas en la construcción de obra pública y civil reclaman al ente que preside José Manuel Vargas 34.183.636,21 euros más los intereses y las costas del procedimiento judicial en concepto de perjuicios. La demanda fue interpuesta en el año 2013 por Acciona Infraestructura SA y Ecisa Compañía General de Construcciones SA. En la actualidad, la causa civil está pendiente de celebración de una audiencia previa, que estaba fijada para este mes de enero que finaliza el sábado.

Así lo pone de manifiesto, al menos, la emisión del folleto informativo de la oferta pública de venta (OPV) y admisión a negociación de acciones de Aena, SA, que la empresa dirigida por Vargas ha hecho llegar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La vista de audiencia previa de las partes tenía que celebrarse este mes de enero, según informa el propio ente Aena. Ayer, ni la compañía aeroportuaria que preside Vargas ni la constructora de la familia Peláez, ni la firma de José Manuel Entrecanales pudieron precisar a este diario si la vista se había celebrado. En los tres casos, además, declinaron realizaron comentario alguno sobre la demanda multimillonaria al considerar que el asunto se halla en estos momentos 'sub iudice', tras casi dos años de instrucción de diligencias por un Juzgado de Primera Instancia de Madrid.

La nueva terminal fue inaugurada por el entonces ministro de Fomento, José Blanco, el 22 de marzo de 2011, justo dos meses antes de las elecciones autonómicas y municipales. La faraónica obra requirió la actividad simultánea en algunos momentos de más de 1.000 trabajadores. La nueva terminal de Alicante forma parte del Plan Levante impulsado por el Ministerio de Fomento a través de Aena para llevar a cabo una completa renovación y modernización de las infraestructuras aeroportuarias.

Este plan se diseñó en el año 1991, bajo el modelo de un plan director de El Altet que contó con la colaboración de todos los agentes turísticos, de la patronal Coepa y de la Cámara de Comercio, especiales reivindicadoras de que no se creara un cuello de botella en el tráfico aeroportuario del destino turístico Costa Blanca.

La nueva terminal está capacitada para atender hasta 20 millones de pasajeros al año. Su superficie total es de 333.500 metros cuadrados, frente a los 54.800 de las terminales 1 y 2, lo que supone multiplicar por seis la superficie inicial. Las nuevas salas de embarque, de 27.000 metros cuadrados, constan de 26 puertas de embarque. Las terminales 1 y 2 sumaban 16. También dispone de un hall de facturación, con una superficie de 15.500 m2, y pasa de 53 a 98 mostradores de facturación, dos de ellos para equipajes especiales. Uno de sus hitos arquitectónicos son las 40 cúpulas con claraboyas con luz natural.