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LAURA GARCÉS
Martes, 17 de febrero 2015, 01:29
El primer paso para prorrogar todos los casos de gestión privada de los servicios sanitarios de la Comunitat Valenciana se va a dar mañana. El PP parece dispuesto a blindar este modelo como ya hizo a principios de este mes con la educación concertada. El grupo parlamentario popular defenderá mañana en Les Corts -así aparece anunciado en el orden del día- una proposición no de ley sobre la gestión concertada en Sanidad. Todo apunta a que esta iniciativa desembocará en la posibilidad de que tanto los cinco hospitales de gestión privada que están en marcha en la Comunitat como otros servicios que también se prestan mediante concierto con la Conselleria de Sanidad, puedan prorrogar su duración una vez expire el plazo establecido inicialmente. Así, según pudo confirmar este diario, sea cual sea en estos momentos la extensión temporal del concierto establecido entre la Administración y el concesionario del servicio, la iniciativa permitirá que cumplidos los plazos, estos se puedan prorrogar.
El modelo de gestión público privado ofrece distintas manifestaciones en el territorio valenciano. Por un lado se encuentran cinco centros sanitarios que trabajan bajo el modelo que en 1999 se estrenó en el Hospital de la Ribera, en Alzira. Los que siguieron sus pasos fueron los centros de Torrevieja, Dénia, Manises y el del Vinalopó, en Elche. La gestión privada de la sanidad también incluye los departamentos de salud de los mencionados hospitales.
Hay que tener en cuenta que la apuesta de la Conselleria de Sanidad por este modelo no se limita a los hospitales. A lo largo de los años ha ido llegando a distintos ámbitos, como el de las listas de espera. De hecho, desde el departamento autonómico se optó por la derivación de pacientes a centros privados para reducir tanto el número de personas pendientes de entrar en un quirófano, como el tiempo medio de demora. Hay otros ejemplos, como es el del IVO en el ámbito del tratamiento del cáncer.
El sistema de gestión privada de la sanidad pública ha sido desde siempre objetivo de críticas de los sectores que han acusado al Ejecutivo valenciano de apostar por la privatización de servicios públicos. Frente a estas posturas, los defensores del modelo han destacado que permite gestionar mejor los recursos públicos.
Sea cual sea la posición que se adopte a la hora de valorar el modelo, los datos recabados por este diario apuntan que en la actualidad 10.000 profesionales trabajan en este modelo que ofrece atención sanitaria a más de un millón de valencianos.
Uno de los últimos periodos de críticas que ha tenido que afrontar el modelo que ahora el PP parece dispuesto a blindar se vivió el pasado mes de noviembre. En ese momento a polémica se ciñó a las circunstancias que rodean la gestión del Hospital de la Ribera, que fue el pionero en lo que a centros sanitarios se refiere.
El conseller, Manuel Llombart, aseguró entonces que el concierto con el hospital no se iba a ver modificado antes de que finalizara el plazo establecido inicialmente. Ello significaba que hasta 2018 no habría pronunciamientos en tanto que la primera concesión fue la Ribera, cuya vigencia no expira hasta el citado ejercicio.
El pronunciamiento de Llombart llegó después de que tanto el grupo PSPV-PSOE como Compromís preguntaran al conseller por la supuesta prórroga de la concesión de la gestión al mencionado hospital. Llombart insistió en que era él quien tenía que plantear la propuesta.
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