Fabra reivindica su labor y se compromete a crear 160.000 empleos en la provincia

El presidente de la Generalitat y del PPCV, Alberto Fabra, comenzó su discurso reivindicando ante Mariano Rajoy la labor realizada por su Ejecutivo en al última legislatura y sacando pecho también por la capacidad de convocatoria del partido en actos como el celebrado ayer en Alicante.

«Me pediste que superáramos la crisis y lo hemos hecho. Me pediste que cuadrara nuestra cuentas y lo hemos hecho. Me pediste que cambiara el paro por creación de empleo y lo hice», le dijo al presidente del Gobierno.

Hizo mención incluso a la mala imagen de la Comunitat que quedó tras el Gobierno de Francisco Camps, aunque sin nombrarlo. «Tú, como yo, sabías que la Comunitat Valenciana era algo distinto a lo que los medios de comunicación y los partidos de la oposición decían que era y ahora te digo yo: quiero ser presidente de la Generalitat», destacó.

De entre las propuestas electorales que introdujo en su mensaje, destaca la de crear 160.000 puestos de trabajo en la provincia a lo largo de la legislatura. También resaltó que quieren multiplicar por diez el número de centros educativos en los que se estudia en inglés, castellano y valenciano. Un trilingüismo del que ya disfrutan 140.000 alumnos en la Comunitat, según Fabra.

No faltó tampoco la que será una de las claves de la campaña electoral del PP, la agitación del voto del miedo mediante las advertencias hacia los partidos de reciente creación. Así, destacó que el Partido Popular es «gente honrada» y «comprometida» con la Comunitat Valenciana frente a los once partidos que se presentan a las elecciones y a los que «lo único que les une y les 'pone' es ir contra el PP».

«Son compañeros de pancarta que hablan mal del territorio, quieren acabar con la enseñanza concertada y tienen un concepto extraño de la pública», opinó.

A los 141 candidatos populares de la provincia de Alicante les pidió «entrega» y «vocación de servicio» a la hora de desempeñar su labor, que sean «alcaldes o concejales 24 horas» para sus vecinos y que hagan de cada problema de su municipio «una misión».