El Lucentum se derrumba en el tramo final

Anoche, el Centro de Tecnificación fue el escenario de un duelo que tuvo todos los ingredientes de un partido grande: tensión, emoción, una grada sumergida en una continua fiesta y espectáculo, aunque la victoria no pudo caer del lado del Lucentum. Eso sí, Alicante revivió los días grandes de baloncesto, y la afición ovacionó y coreó a los suyos por el esfuerzo realizado a pesar de la derrota. Pero la cruda realidad fue que el Amics se llevó el triunfo (59-68) en el tercer partido de la serie de semifinales del 'play off' por el ascenso a la LEB Oro, para poner así el 1-2 y recuperar el factor cancha que tenían los alicantinos tras vencer en el primer enfrentamiento de la serie en el Ciutat de Castelló.

La eliminatoria continuará mañana, también en el Centro de Tecnificación, a las 18.00 horas, en un duelo que promete volver a ser vibrante, ya que una derrota del Lucentum supondría el adiós a una temporada de mucho mérito, pero que lo puede ser aun más si los alicantinos obran la machada y remontan la serie, lo que supondría clasificarse para una final en la que ya espera el Guadalajara, que eliminó ayer al Zornotza por la vía rápida.

No se puede recriminar nada a los locales, que volvieron a plantar cara a una plantilla que tiene todo lo necesario para ganar el 'play off', aunque la falta de acierto en la línea de tres y una preocupante mala noche en el tiro libre acabó por desequilibrar el encuentro, sobre todo en el último cuarto, cuando los castellonenses se pusieron serios para recuperar la ventaja de pista, además, los alicantinos no se encontraron a gusto en esos últimos diez minutos, en los que solamente consiguieron anotar una canasta que no fuese de tiro libre. Pero antes del cuarto acto, los de Kuko Cruza completaron 30 minutos muy buenos, con la suficiente intensidad como para detener al ataque del Amics, algo que han podido hacer muy pocos equipos esta temporada.

El Lucentum comenzó el choque con la mentalidad que se necesita en los partidos grandes y sin la presión que también suele ir acompañada a esta clase de duelos. Por eso al principio todo era fácil, Edu Guillén las enchufaba desde el perímetro mientras que Samuel Domínguez dominaba la pintura. Entre los dos consiguieron que el inicio de los locales volviese a ser arrollador. Sin embargo, el conjunto de La Plana sí que notaba la ansiedad y solamente el pívot Víctor Hidalgo hacía daño a los alicantinos, que terminaron el primer cuarto con una ventaja de ocho puntos (20-12).

En el segundo cuarto, Kuko Cruza utilizó el banquillo para dar aire a los titulares y refrescar al equipo, que continuó con la misma dinámica gracias a Johan Kody: el pívot africano anotó once puntos en sus primeros diez minutos. Pero, aunque el Lucentum mantuvo su nivel, los castellonenses comenzaron a despertar paulatinamente. Toni Ten dio entrada a Nick Washburn y a Joan Faner, y entre ambos hicieron que su equipo fuese entrando en el partido y reduciendo la ventaja para llegar al descanso con 34-29.

Fue tras el paso por los vestuarios cuando se consumó el despertar visitante. El tercer cuarto comenzó con dos triples seguidos del Amics Castelló, el primero en anotar fue Carles Marzo, al que le siguió Chema García. Esos seis puntos consecutivos hicieron que los visitantes se pusiesen por primera vez por delante en el luminoso. Aunque poco les duró, Adrián Fuentes respondió con cinco puntos seguidos, pero daba igual, los de La Plana ya habían cogido el ritmo al duelo. Y es que en el tercer cuarto ya se mostraron muy superiores a un Lucentum que poco a poco se iba desesperando desde la línea de tres, la que es su gran arma y que ayer no consiguió utilizar.

Cuando comenzó el último acto, el Amics ya estaba por delante (50-51) y una vez que el segundo clasificado de la liga regular se pone arriba, es muy difícil remontar. Algo que ya sabían los alicantinos y que ayer confirmaron. Además, en esos últimos diez minutos, el Lucentum empezó a notar la presión que no había sentido en el resto de la serie. Los de Kuko Cruza anotaron tan solo siete puntos, cinco de ellos de tiro libre, para caer por 59-68.