

Secciones
Servicios
Destacamos
Eneas G. Ferri
Sábado, 30 de mayo 2015, 01:00
La XII edición del Festival de Cine de Alicante comenzó ayer su andadura con la celebración de la gala inaugural en el Auditorio de la Diputación de Alicante. Este año, como novedad, la organización ha apostado por acercar el cine a los ciudadanos, con múltiples proyecciones en las calles y salas de la ciudad y, por lo que parece, los alicantinos respondieron a esta invitación.
Pasaban las 19.30 horas de la tarde cuando comenzaron a llegar los primeros famosos e invitados a la flamante alfombra roja, ayer en colores también azul y blanco, del auditorio provincial. Aunque fueron muchos los rostros conocidos, los mayores griteríos fueron dedicados a los actores premiados de Honor y con el galardón Ciudad de Alicante, Eduard Fernández y Úrsula Corberó, respectivamente.
Aunque fueron los principales protagonistas, no quedaron atrás conocidos actores de televisión como los alicantinos Vanesa Romero y Luis Miguel Seguí, la casi alicantina por su relación con la ciudad Antonia San Juan o el conocido por su papel de portero en la serie 'Aquí no hay quien viva' Nacho Guerreros, que junto a otros como Brays Efe o Maxi Iglesias, se fotografiaron con los espectadores apostados a la puerta del edificio.
La velada, que comenzó con más de media hora de retraso, fue magistralmente conducida por Luis Larrodera, un habitual que suma años en el evento y que ya parece, incluso, tiene cierta familiaridad con organizadores y políticos provinciales, a los que demuestra un exquisito trato.
El pianista Giuliano Parisi abrió la gala con una interpretación de al piano y acompañó toda la velada con su música. Le siguió Vicente Seva, director del festival con su discurso. En él, manifestó que «este evento sigue vivo gracias al apoyo de las instituciones y de los patrocinadores», a lo que añadió que «es un festival para el cine, para la cultura y para la ciudad».
Tras la presentación de los jurados para animación, cortos europeos y de la crítica Sergio Balseyro, subió al escenario el jurado oficial, con Emma Caballero, José Luis Ferris y la presidienta, Giovanna Ribes, que manifestó que «serán días difíciles para la decisión, pero buenos para disfrutar del cine. Este festival es necesario que exista».
Tras la intervención de la cineasta valenciana llegó el primer momento emotivo de la noche, con la entrega del premio Lucentum a Mariano Barroso de manos del actor, también premiado en la noche, Eduard Fernández.
El director catalán, que subió al escenario con sus hijos Martina y Pablo, confesó que «siempre es especial recoger un premio, pero aquí en Alicante lo es más, porque estoy muy ligado a la ciudad, donde he trabajado y donde sigo haciéndolo».
El segundo de los premios dejó un simpático sabor de boca. Era sabido que Úrsula Corberó recibía el galardón Ciudad de Alicante, pero la entrega resultó cómica, festiva, alegre y emotiva. El actor Brays Efe, compañero de la catalana en la recién estrenada 'Cómo sobrevivir a una despedida', subió al escenario para la entrega. Presentó un vídeo con las felicitaciones de otros amigos de Corberó, en el que destacó una cómica felicitación de la actriz Amaia Salamanca.
Pero la sorpresa fue la aparición de una actriz veterana, haciéndose pasar por elegida por Internet para entregar el galardón. Finalmente, apareció el actor Maxi Iglesias, amigo de una Úrsula Corberó que desconocía la presencia de su amigo en Alicante para la entrega del premio.
Emocionada
Visiblemente emocionada, la actriz catalana expresó que «venía con mi rimmel y ya no tengo nada con tanta emoción». «Para mi es un premio muy significativo. Aunque soy joven, tengo la agenda apretada y me surgen dudas. Ahora pienso en esto y me sirve para darme cuenta de que tengo que seguir adelante, de que tengo la suerte de trabajar en cine, teatro y televisión y que es la vocación que llena mi vida», concluyó antes de abrazar a sus amigos.
Tras estos momentos, que fueron notablemente disfrutados por el público, se pasó al punto de mayor importancia en la noche: la entrega del premio de Honor.
Eduard Fernández subió al escenario, con su porte de uno de los tantos personajes de tipo duro que ha interpretado, pero con una nariz de payaso, recordando sus inicios en el oficio del teatro.
Al recibir el galardón de manos de la actriz Antonia San Juan, esa apariencia quedó en pura sensibilidad cuando expresó que «cuando voy por la calle o cuando veo la tele, incluso a los políticos, a veces los imagino con esta nariz y veo sus debilidades. Así todo es más feliz y nadie me cae mal».
Tras este pequeño comentario amable, comentó que «los premios de honor parece que sean un hasta aquí, pero yo pienso seguir trabajando duro», y concluyó con un bonito mensaje dirigido a los jóvenes, a los que recordó que «cuando empecé, mi padre dudaba de si me ganaría la vida. Ahora hago puedo decir que he hecho lo que me gusta. No dejéis nunca de intentar cumplir vuestros sueños». Sus palabras arrancaron una cerrada ovación.
Y con esto, el público alicantino comenzó a disfrutar del Festival de Cine, ese evento que desde hace doce años lleva el séptimo arte a las calles, a las plazas y que, durante toda la semana, encenderá los proyectores para los alicantinos. Esos que proyectan, casi siempre, los sueños.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.