Cuatro de cada 10 pueblos destruyen negocios o no los crean en la provincia

El 30% de nuevos empleos autónomos y tiendas se inician en Alicante, Elche, Torrevieja y Santa Pola por el tirón de turismo y construcción

Bernat Sirvent

Viernes, 5 de junio 2015, 00:49

Los incipientes indicios de recuperación económica son demasiado tímidos y no presentan una distribución homogénea por la provincia. Antes bien, se acentúa el abandono económico del interior de la provincia en favor de las urbes grandes y medianas vinculadas, sobre todo, al sector hostelero y turístico. Los últimos datos de la Tesorería General de la Seguridad Social manejados por la Asociación de Autónomos UPPTA-PV avalan claras diferencias entre el litoral de la Costa Blanca y los municipios más alejados de él desde el punto de vista de los nuevos negocios de emprendedores.

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De los 141 municipios que conforman la provincia, treinta y tres no registran ni altas ni bajas en el régimen especial de autónomos en el último mes contabilizado pueblo a pueblo. En otras veinticinco ciudades, se registra destrucción de negocios de este tipo, entre los que abundan los bares y restaurantes, las tiendas de todo tipo y los despachos de servicios profesionales.

Dentro del grupo de los que mantienen inalterable en abril el número de altas en régimen por cuenta propia llama poderosamente la atención el caso de Aspe por su población y por la existencia ya de 1.268 autónomos. El resto de municipios con balance plano de negocios son: Agres, Alcocer de Planes, Alcoleja, Alfafara, Almudaina, Balones, Benassau, Benifallim, Benijófar, Benimarfull, Benimassot, Cañada, Daya Vieja, Fatgeca, Famorca, Gaianes, Hondón de los Frailes, Llíber, Millena, Parcent, Pedreguer, Penáguila, Planes, Relleu, Sagra, Salinas, Sanet i Negrals, Senija, Tollos, Tormos, Vall d'Alcalà y Vall d'Ebo. Los municipios en los que el saldo es negativos son: Aigües, Albatera (también un municipios medio como Aspe con casi mil autónomos actualmente, seis menos que en marzo), Algueña, Alquería d'Asnar, Banyeres (otrora emporio de la industria textil), Benidoleig, Benillup, Biar, Bolulla, Busot, Confrides, Cox, Quatretondeta, Daya Nueva, Granja de Rocamora, Jacarilla, Monóvar (núcleo de calzado y vino), Murla, Orba, Orxeta, La Romana, San Fulgencio, San Miguel de Salinas, Vall de Gallinera, Villena (capital administrativa del Alto Vinalopó y núcleo industrial de calzado infantil y otros muchos sectores) y Los Montesinos.

Todos o casi todos los municipios con desarrollo plano de la economía desde el punto de vista de la apertura de nuevos negocios autónomos, los que realmente crean empleo según admite la Administración, también presentan aumento ligero del desempleo por cuenta ajena: trabajadores que dependen de la empresa pública o privada. O directamente, ni creación ni destrucción de empleo. La inmensa mayoría de estos pueblos son del interior de Alicante, en las comarcas de l'Alcoiá, El Comtat y Marina Alta. Pero la reducción de negocios o la no creación de nuevos en Aspe, Banyeres, Monóvar y, sobre todo, Villena reflejan que los síntomas de recuperación son mucho más débiles de lo que hacen creer las Administraciones central y autonómica en los últimos meses.

El tirón de emprendedores se concentra en un puñado de municipios del litoral por turismo y construcción. Solo en Alicante (144 autónomos más), Elche (64), Torrevieja (55) y Santa Pola (50) acumulan el 30% de las nuevas altas en el régimen especial de la provincia en abril, que sumaron 1.015 en total.

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El dato de mayo conocido anteayer también revela a las claras esa tímida recuperación. Alicante sigue con saldo positivo de autónomos, pero la cifra se frena de modo muy notable. De los 1.015 nuevos cotizantes por cuenta propia de abril se pasa a 917 en mayo, pese a que se aproxima más la temporada alta de verano, sector que ejerce de locomotora laboral en la Costa Blanca de un modo clarísimo, con el 65% de reducción del paro el pasado mes. Algunas voces alertaban de que podría estar frenándose el número de altas ante el cambio de Consell y la posible supresión de la ayuda de la UE de 3.000 euros a quien sale de la bolsa del paro para montar un negocio. Pero los responsables de la Plataforma de Autónomos, Miguel Pacheco y Julio Luján, descartan esta hipótesis.

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