Ximo Puig, presidente de la Comunitat

El socialista Ximo Puig ha sido elegido presidente de la Generalitat Valenciana, al lograr el apoyo de los parlamentarios de PSPV y Compromís y de ocho diputados de Podemos, de modo que ha logrado 50 votos favorables, justo el número de la mayoría absoluta necesaria.

Así, Puig se convierte en el sexto jefe del Ejecutivo valenciano y en el segundo socialista que ocupa este cargo. De este modo, ha sido investido jefe del Consell y sucede al socialista Joan Lerma y a los 'populares' Eduardo Zaplana, José Luis Olivas, Francisco Camps y Alberto Fabra.

Las Corts Valencianes, en su primera declaración institucional en esta novena legislatura, han acordado expresar su "denuncia explícita" contra la homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia y su compromiso para tomar medidas para erradicar y para exponer su "apoyo activo" al asociacionismo LGTB+ en la lucha contra "cualquier tipo de discriminación hacia este colectivo".

La declaración institucional, firmada por todos los grupos, expone que el 28 de junio de 1969 se produjeron diversas revueltas en Stonewall (EEUU) para denunciar la criminalización a la que estaban sometidas las personas LGTB+. Desde entonces, las organizaciones sociales conmemoran en todo el mundo el orgullo LGTB+, reivindicando sus derechos, la dignidad y la igualdad de este colectivo.

También hay que reconocer, indica el texto, la existencia de iniciativas de las diversas administraciones que tienen como objetivo un compromiso con la lucha colectiva por la igualdad y la libertad de toda la ciudadanía.

"No se debe producir ninguna discriminación por motivo de sexo, identidad de género de orientación sexual porque aunque se han dado avances importantes como la modificación del Código Civil en 2005, para permitir el matrimonio igualitario, queda mucho camino por recorrer", ha apuntado.

Pleno de investidura

Tras la constitución de las Corts el pasado 11 de junio, el pleno de investidura se ha celebrado este jueves y en él Puig --el único candidato propuesto a 'president'-- ha obtenido, mediante sistema de votación pública por llamamiento, el "sí" de 50 diputados, es decir, de los parlamentario socialistas, de Compromís y de ocho de Podemos --los otros cinco representantes de este grupo se han abstenido, entre ellos, su portavoz, Antonio Montiel--.

Por su parte, PP y Ciudadanos han votado "no" a la investidura de Puig, de forma que se han logrado 44 votos en contra. La anécdota de la votación la ha protagonizado el 'popular' Miguel Ángel Mulet, quien ha respondido: "Sí, no, perdón".

El portavoz de Podemos, Antonio Montiel, ya había avanzado en su discurso que su grupo parlamentario daría sólo ocho de sus 13 votos a la investidura del socialista Ximo Puig como 'president' de la Generalitat --justo los que necesitaba para la mayoría absoluta--, "para estar seguros de que no olvidará el compromiso adquirido con la sociedad valenciana en el Acord del Botànic".

En su discurso de este mañana, Ximo Puig, se ha comprometido a poner a las personas en el centro de la acción política y ser un presidente "cercano y humilde", y ha pedido la confianza del Parlamento valenciano para gobernar "humildemente y pensando antes de nada en los más humildes".

Por su parte, el portavoz del PP en las Corts y ya expresidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ha defendido con "orgullo" la gestión que ha hecho su Gobierno en los últimos cuatro años, "los peores de la crisis" y ha pedido a Puig que se aleje de "tentaciones del populismo" del "multipartito".

Por su parte, la portavoz de Compromís, Mónica Oltra, ha dado su apoyo al candidato del PSPV para "crear las bases de un nuevo país" y "contribuir a que el Acord del Botànic sea una realidad", mientras que la síndica de Ciudadanos, Carolina Punset, ha centrado su intervención en la lengua y ha advertido de que "allá donde triunfa la inmersión lingüística estamos volviendo a la aldea".

Toma de posesión

Tras ser investido 'president', el siguiente paso que dará Puig será el juramento o promesa del cargo y la toma de posesión, tras su nombramiento por el Rey. Será el domingo cuando se celebrará este acto, a partir de las 11.00 horas, al que está previsto que asistan el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez; el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero; el exministro y actual portavoz del grupo socialista en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, y el secretario general de UGT, Cándido Méndez.

Tras jurar o prometer su cargo, Puig hará una "proposición" sobre su programa de gobierno -que no será objeto de debate-- y, a continuación, la comitiva socialista se desplazará hasta el Palau de la Generalitat donde se realizará un acto simbólico de apertura de puertas a la sociedad.

Ximo Puig, de 56 años y natural de Morella (Castellón), está casado y tiene dos hijos. Periodista de profesión, trabajó en el periódico Mediterráneo de Castellón, la Agencia EFE, Radio Popular y Antena 3 Radio.

En mayo de 1995 fue elegido alcalde de Morella y fue reelegido por mayoría absoluta primer edil en las convocatorias electorales de 1999, 2003 y 2007. Diputado autonómico desde 1999 hasta 2011, fue portavoz del grupo socialista, vicepresidente de las Cortes valencianas y portavoz adjunto.

En 2011 fue elegido miembro del Congreso de los Diputados por la circunscripción de Castellón, escaño que dejó tras las elecciones del pasado 24 de mayo. Es secretario general del PSPV-PSOE desde el 1 de abril de 2012 y, mediante primarias abiertas, fue el primer candidato socialista a la Generalitat elegido por este proceso con el voto de más de 40.000 valencianos.

Propone 40 medidas

El candidato socialista a la Presidencia de la Generalitat, Ximo Puig, ha propuesto en el debate unas cuarenta medidas que persiguen que el futuro Ejecutivo autonómico "gobierne humildemente y pensando antes que nada en los más humildes". Las iniciativas que ha avanzado girarán en torno a cinco ejes, el "rescate a las personas", la lucha contra la corrupción, un gobierno "centrado en las personas", el impulso a un nuevo modelo productivo y la exigencia de una financiación "justa".

Así lo ha explicado Puig durante su discurso en el pleno de las Corts Valencianes en el que será investido 'president' y en el que ha desgranado algunas de la principales líneas de su programa de gobierno.

La primera medida del renovado Consell, ha dicho, será "pedir perdón" a las víctimas del accidente del metro de Valencia de 2006 -en el que murieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas- y, a partir de ahí, poner en marcha acciones para "sacar a la Comunitat de la situación de emergencia social, económica y política que sufre".

Entre las medidas de carácter asistencial, el líder de los socialistas valencianos se ha comprometido a impulsar una ley autonómica por la Función Social de la Vivienda; paralizar los casos más graves de desahucios; aplicar la Ley de Dependencia; derogar el copago; abrir los comedores escolares en vacaciones e implantar progresivamente la renta garantizada de ciudadanía.

En cuanto a lo que ha denominado "renovación de la democracia y lucha contra la corrupción", Puig apuesta por una "verdadera" Ley de Transparencia; crear una oficina contra el fraude; suscribir pactos de integridad con contratantes de la administración; proteger a los denunciantes de prácticas corruptas; habilitar el 'diputado número 100' para aumentar la participación ciudadana; hacer una 'auditoría ética' y facilitar el trabajo de la oposición renunciando, por ejemplo, a preguntar en las sesiones de control al presidente para dejar el espacio de fiscalización al resto de grupos.

"La Comunitat Valenciana no es una comunidad corrupta. Los valencianos y las valencianas somos tan honrados como el que más, los que han sido corruptos han sido sus dirigentes", ha sentenciado.

"No estamos todos"

Asimismo, el futuro jefe del Consell ha propuesto una reforma electoral para rebajar el listón del 5 por ciento "y facilitar todavía más la pluralidad" en el parlamento autonómico. "No estamos todos", ha aseverado.

Una parte del paquete de medidas se ha centrado en los ámbitos de la educación y la sanidad. En este capítulo, Ximo Puig ha defendido la conveniencia de retrasar el inicio del curso escolar al 10 de septiembre --la Conselleria de Educación en funciones lo había establecido el 3--; ampliar al oferta en el nivel de Infantil; elaborar una auditoría de la privatización de la sanidad; eliminar el copago en los medicamentos para pensionistas; lanzar planes de igualdad salarial y una ley valenciana contra la violencia de género.

El candidato socialista ha puesto énfasis en la consecución de "una financiación justa y unas cuentas claras". Ha subrayado en este punto la exigencia de un nuevo modelo de financiación y ha prometido que, "independientemente de quién gobierne en Madrid" tras las próximas elecciones generales, se emprenderán acciones legales si no se consigue de forma negociada. "La Comunitat está exhausta de ofrendar nuevas glorias a España", ha resaltado citando el himno de la comunidad.

"Auditoría integral"

También ha asegurado que se solicitará un mecanismo extraordinario de financiación hasta que se apruebe un nuevo modelo; se negociará el pago de la deuda histórica, y realizará una "auditoría integral" de la Generalitat.

Sobre la cultura, ha dicho que es "un valor colectivo de las sociedades modernas" y ha garantizado que para el nuevo Gobierno valenciano "no será una mercancía más". Por eso, ha continuado, "reabriremos RTVV". "Y lo haremos dialogando y será una televisión pública sostenible económicamente, independiente y plural", ha apostillado.

Finalmente, por lo que respecta a la economía, ha aludido a una nueva Agencia de Innovación; la refundación del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF); un Plan de Empleo para jóvenes y parados de larga duración; una planificación estratégica del sector agroalimentario y un Plan de Competitividad del Turismo, entre otras cuestiones.

El candidato a la Presidencia de la Generalitat también ha asegurado que es "rehén" de los más de 500.000 parados que hay en la Comunitat Valenciana y de los discapacitados a los que "quitaron" los derechos.