Catorce menores viven sin luz ni agua en un bloque ocupado de Carolinas

En un bloque a medio terminar, sin licencia de habitabilidad y sin las mínimas condiciones de salubridad y seguridad. Así viven siete familias alicantinas que han ocupado otras tantas viviendas en construcción ubicadas en la calle General Espartero. Entre los 24 okupas hay 14 menores.

La Concejalía de Vivienda y Acción Social, que dirige Nerea Belmonte, ha tenido conocimiento de este caso a través de la Plataforma Stop Desahucios de Alicante, que es la que coordinó la ocupación de este edificio completo hace pocas semanas, coincidiendo con las Hogueras.

Se trata de un inmueble de tres pisos y siete viviendas, sin cédula de habitabilidad, propiedad de la entidad bancaria Liberbank.

En él conviven 24 personas: 10 adultos, dos adolescentes, 10 niños de entre 4 y 7 años y dos bebés, uno de ellos de menos de 1 año.

La Plataforma denunció el empeoramiento de la situación de estas familias por el agotamiento de los depósitos de agua con los que contaban, hace más de una semana, y el corte del suministro eléctrico, que se produjo hace cuatro días.

A las altas temperaturas de estos días y las consecuencias que pueden tener la falta de agua y suministro eléctrico se da la circunstancia de que una de las mujeres es diabética y hay un menor con minusvalías.

La propia Belmonte, el gerente del Patronato Municipal de la Vivienda, Gaspar Mayor, la jefa del Departamento de Centros Sociales, Rosa Rovira y la responsable del Departamento Social del Patronato de la Vivienda, Mayte Fernández, acudieron el miércoles al bloque para evaluar la situación de las familias, así como para «poner en marcha las medidas necesarias que garanticen la protección de los menores», resaltaron desde Acción Social.

Ayer lograron que Iberdrola acceda devolviese la luz y concediese una moratoria de una semana para el corte, aunque a última hora de la tarde todavía no había vuelto el suministro. En este intervalo de tiempo, Acción Social procederá a estudiar una a una la situación de las familias para determinar si son ya perceptoras de ayudas, en qué situación económica se encuentran y de qué forma puede ayudarlas.

Darles un piso será complicado, según explicaba el gerente del Patronato de la Vivienda, Gaspar Mayor, dado que existen en estos momentos «listas de espera de más de cien personas para los pisos municipales y más de mil para los de la Generalitat».

Por el momento, quienes sí están ayudándoles son los integrantes de Stop Desahucios y Cáritas de Carolinas, que les han facilitado alimentos.

La plataforma denunció ayer el retraso en tomar medidas ante la situación de «emergencia» de las familias y amenazó con convocar hoy una concentración frente al bloque para protestar y demandar una solución.

Explican que las familias proceden de distintos procesos de desahucio y que estaban repartidas antes por distintos barrios en otros pisos. Una de ellas, con tres hijos, está pendiente de que le archiven el procedimiento penal iniciado por una entidad bancaria por no desalojar una vivienda de su propiedad. La plataforma les asesoró en la ocupación del bloque de Carolinas.