Alicante y Elche exigirán más inversiones para mejorar las conexiones de ambas ciudades

Sonrisas, gestos de complicidad y bromas marcaron la distendida primera toma de contacto entre los equipos de gobierno de Alicante y Elche. El alcalde alicantino, Gabriel Echávarri, se mostró «emocionado» al poder dar la bienvenida a su homólogo ilicitano, Carlos González, en un encuentro que a su juicio «rompe una incomunicación histórica» y prometió que «esta reunión no será solo una foto» en alusión a la que se hicieron años atrás sus antecesoras en el cargo, Mercedes Alonso y Sonia Castedo. Más allá de las imágenes y del recorrido por la zona noble del Consistorio, ambos alcaldes dejaron clara una premisa: «Vamos a ir de la mano a Madrid para exigir unas inversiones justas y acordes a lo que merecen los alicantinos y los ilicitanos; estos Presupuestos Generales son injustos para nuestra ciudadanía», estableció en primer lugar Echávarri. No se quedó lejos González, que pidió al Gobierno Central «una inversión en infraestructuras mayor de la que establece el reparto actual» y añadió que « la sociedad alicantina necesita más de lo que se le está dando actualmente».

Las infraestructuras fueron el eje principal (no el único) de la corta reunión que mantuvieron ambos equipos de gobierno. Fue así por una razón obvia. «Las enmiendas a los Presupuestos Generales hay que realizarlas ya, y vamos a realizarlas de forma conjunta», aseguró Echávarri. Estas enmiendas servirán para reclamar una mayor inversión con el fin de que ambas localidades puedan llevar a cabo proyectos como la construcción de un tercer carril en la A-31, mejorar las condiciones de la N-332, realizar actuaciones en materia ferroviaria en la línea Alicante-Murcia, y sobre todo, la duplicación y mejora de los accesos al aeropuerto de Alicante-Elche.

Estos fueron los principales puntos a tratar en el encuentro por diversos motivos. «El tercer carril de la A-31 es un proyecto que lleva tiempo en espera, pero el Gobierno de Rajoy no tiene tiempo de prestarle atención», aseguró González. Por otro lado, la línea de ferrocarril entre Murcia y Alicante «necesita ser duplicada y electrificada para poder reducir a la mitad la distancia entre las dos ciudades», afirmó el alcalde ilicitano, que tampoco se quiso olvidar del AVE regional, al que tildó de «infraestructura vertebradora de nuestro territorio». Otra inversión «necesaria» para ambas localidades, según González, es la de duplicar y mejorar los accesos a El Altet, uno de los «aeropuertos más dinámicos y con mayor número de pasajeros de España y del que el Gobierno del señor Rajoy se olvida sistemáticamente». Echávarri y González, acompañados por sus socios de gobierno (los concejales alicantinos Natxo Bellido y Miguel Ángel Pavón, y Mireia Mollà por el equipo de gobierno ilicitano, ya que Cristina Martínez no asistió), acordaron la creación de una comisión mixta para abordar actuaciones estratégicas que afecten, por ejemplo, a los planes urbanísticos de las dos ciudades. «Ahora mismo estamos en una fase preliminar, no podemos concretar nada del PGOU, pero estamos seguros de que nos coordinaremos», afirmó González. Por su parte, Echávarri apuntó que «estos contactos políticos se traducirán en acuerdos técnicos, pero de momento no se puede materializar ni concretar nada, es pronto. En la próxima reunión seguro que podremos llegar más lejos en este asunto».

También pudieron hablar del retorno de la Dama de Elche a la localidad ilicitana, misión para la que contará con el apoyo de Alicante. «Vamos a llevar al próximo pleno una declaración institucional para que la Dama vuelva a su ciudad natal», confirmó Echávarri. Entre las cuestiones que quedaron en el tintero destaca el turismo. Pese a que ambos alcaldes admitieron que es «un tema de vital importancia», consideraron que en la cita de ayer «era más necesario hablar de otras materias». De lo que seguro hablarán en la siguiente reunión será del futuro de la Institución Ferial Alicantina (IFA). «Está en territorio ilicitano, pero al igual que el Puerto de Alicante, debe ser de uso provincial, y trabajaremos para que así sea», aseguró González.

Ambos equipos de gobierno quedaron emplazados para dentro de un mes en un nuevo encuentro en el que se comprometieron a llevar propuestas sólidas para mejorar las conexiones entre Alicante y Elche. Lo que sí quedó claro tras el encuentro de ayer es que las relaciones entre la segunda y la tercera ciudad más pobladas de la Comunitat tienen visos de entrar en otra senda. Ambos alcaldes coincidieron en señalar que «se trabajará para que la frontera sea un nexo de unión y no sirva para separar, como hasta ahora».