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R. A.
Jueves, 13 de agosto 2015, 00:47
El presidente del PP de Alicante, José Císcar, instó ayer al presidente de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, a quien ve «de la mano» del presidente manchego, Emiliano García-Page, que defienda de forma contundente el trasvase Tajo-Segura. En un comunicado, Císcar se pronunció así después de que desde Castilla-La Mancha hayan pedido el cese inmediato de las transferencias de agua desde el Tajo por estar los pantanos de Entrepeñas y Buendía con pocos recursos. «Los socialistas de Castilla-La Mancha están alimentando el debate del agua y la actitud timorata de Puig está generando incertidumbres en los principales sectores económicos de la provincia de Alicante», alertó Císcar, quien por el contrario afirmó que en materia de agua «el PP va de la mano de regantes y agricultores, mientras que Puig va de la mano del PSOE castellano-manchego».
Císcar recordó que el memorándum Tajo-Segura deja claro que el mínimo para poder trasvasar este año es de 304 hectómetros cúbicos, una cifra lejana de lo que actualmente almacenan los pantanos, 398. «El memorándum dice que la línea de reserva será de 400 hectómetros a los cinco años desde su aprobación, y solo han pasado dos. Eso es algo que deberían saber García-Page y la consejera de Fomento del Gobierno socialista de Castilla-La Mancha» (Elena de la Cruz), destacó Císcar.
«La Comunitat Valenciana no puede ser el chivo expiatorio de la falta de gestión del PSOE en Castilla La Mancha y la Comunitat, máxime en un momento en que existen verdaderos problemas de abastecimiento en muchas poblaciones, especialmente de la provincia de Alicante», dijo.
Dinero
El presidente de los populares alicantinos también apuntó que los regantes de las zonas receptoras han pagado 412 millones a Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura para desarrollar obras relacionadas con la optimización del trasvase. Prosiguió que «a lo largo de este verano, la Comunitat Valenciana y la provincia de Alicante están acogiendo a una gran cantidad de ciudadanos procedentes de Castilla-La Mancha».
«Tal vez haya llegado el momento de decir a esos castellano-manchegos de buena fe, que el señor García-Page y su consellera de Fomento están haciendo todo lo posible para que esas personas se queden sin agua durante sus vacaciones», dijo.
Císcar acusó al jefe del Consell valenciano, Ximo Puig, y a su consellera de Agricultura, Elena Cebrián, de ser «injustos y demagógicos con Alicante porque han tenido el valor de marcharse a descansar sin resolver el problema más acuciante, que es el agua, sin fijar una postura de gobierno y sin ejercer las obligaciones que su responsabilidad institucional les arroga». «Frente a todo ello, el PP sí va a defender a esta Comunitat y a esta provincia» sin «permitir que una sola gota de agua pagada con el esfuerzo, el sacrificio y el trabajo de los agricultores de la provincia se quede sin venir».
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