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Eva María Lahoz
Martes, 18 de agosto 2015, 00:32
Las huelgas nocturnas del servicio de autobuses interurbanos y del Tram se prolongan ya desde hace varias semanas sin que exista la menor perspectiva de que vayan a terminar, al menos, hasta septiembre. Unos paros que han coincidido con la época veraniega, que es cuando más se utilizan estos servicios, sobre todo por parte de los jóvenes, y que están generando situaciones de riesgo y mucha tensión en la noche alicantina. Por eso el Tramnochador es un servicio que se presta exclusivamente en periodo estival.
El grupo municipal del PP denunció ayer que la falta de transporte público hace que sean muchos los jóvenes que arriesgan incluso sus vidas para llegar a sus casas. En algunos casos, porque cogen el coche después de haber bebido y, en otros, porque llegan incluso a volverse andando a sus localidades de origen.
«Ha sido lamentable ver cómo hileras de jóvenes tenían que volver andando desde Alicante a la playa, a San Juan, Mutxamel o San Vicente, por las carreteras y por la avenida de Dénia, con el consiguiente peligro para su seguridad», explicaban ayer desde el grupo, en referencia a una situación que, dicen, han podido comprobar este último fin de semana.
Los populares critican que si no hay un transporte público con el horario y frecuencia necesarios, «condenamos a nuestros jóvenes a correr riesgos innecesarios o a usar sus propios vehículos».
Además, se producen situaciones tensas en las paradas de taxis, que no dan abasto las noches de los fines de semana, y en las paradas de los pocos autobuses que circulan por los servicios mínimos.
En el PP echan la culpa de la situación a los nuevos gestores del Consell, que, según los propios trabajadores del Tram y de La Alcoyana, se ha «desentendido» de ambos conflictos hasta septiembre, pese a que la situación es muy compleja este mes en Alicante.
«Están generando un problema que, esperemos que no haya que lamentar aún más, aunque sí parece que han sido bastante más diligentes dando solución al tramo entre Benidorm y Altea», lamenta el PP. Que también culpa al Ayuntamiento de no haber hecho «absolutamente nada», cuando «es su obligación velar por la seguridad y bienestar de los alicantinos».
Piden al equipo de gobierno municipal que exija una solución inmediata al Consell y se pongan a trabajar para resolver un problema que «está afectando a los alicantinos y a la imagen turística de Alicante».
Sobre todo en el caso del Tram, que depende en exclusiva y de forma directa de FGV, es decir, del Consell. La empresa pública, según denunciaron los trabajadores la semana pasada, no ha accedido a reunirse con ellos para alcanzar un pacto temporal que permita desconvocar los paros.
El servicio de Tramnochador solo está vigente en verano, por lo que en septiembre los empleados deberán decidir si se acaba el paro o lo trasladan a otro horario.
Sin embargo, el problema puede recrudecerse en los autobuses en tres semanas, dado que los trabajadores de La Alcoyana ya advirtieron de que si no se alcanzaba un acuerdo con la empresa y con la Generalitat, a partir del día 10 de septiembre la huelga se extendería a todo el servicio, es decir, las 24 horas, y de forma indefinida.
Las reuniones mantenidas con representantes autonómicos y la negociación con la empresa no han dado, por el momento, ningún resultado.
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